* Es uno de los satélites del planeta Saturno
La República
Entre 2004 y 2017, la sonda Cassini de la NASA sobrevoló Saturno y sus satélites. Uno de ellos, llamado Encélado, captó la atención de los científicos debido al vapor de agua que brotaba desde su superficie cubierta de hielo.
Durante ese periodo y hasta la actualidad, los datos obtenidos por la nave espacial han dado lugar a descubrimientos cada vez más prometedores en este mundo helado de 500 kilómetros de diámetro (seis veces más pequeño que la Luna), a tal punto que se ha convertido en el lugar del sistema solar con más probabilidades de albergar vida.
Un océano oculto y otras sorpresas
Las observaciones de Cassini mostraron que el vapor de agua salía de unos géiseres ubicados en el polo sur de Encélado. ¿Cómo era posible un fenómeno así sobre una capa de hielo de kilómetros de espesor?
Para averiguarlo, los científicos de la NASA hicieron que la sonda sobrevolara esta región a una altura de solo 50 kilómetros. La nave fue bañada por el vapor que emanaba de los géiseres.
El posterior análisis de la composición química de esas partículas reveló que su origen más probable eran procesos volcánicos en el fondo de un océano de agua líquida.
Según la explicación de los investigadores, el agua caliente surgiría de chimeneas hidrotermales en el fondo del mar y luego atravesaría el hielo para emerger por los géiseres.
En la Tierra, la actividad hidrotermal ocurre cuando el agua que se filtra en el fondo del océano, pasa cerca de una fuente de calor como el magma y sale disparada nuevamente al mar a través de chimeneas.
Los estudios estiman un fuerte contraste entre la temperatura superficial de Encélado, a -200 °C, y su cálido océano interno, que puede llegar hasta los 87 °C en algunos sectores.
En 2021, otro equipo de científicos notó que la cantidad de metano en el vapor de agua de Encélado es demasiado alta en comparación con lo que producen las fuentes hidrotermales de nuestro planeta.
Al analizar todas las posibles explicaciones, concluyeron que el exceso de metano es consistente con actividad biológica en las fuentes hidrotermales.
Por ejemplo, en la Tierra, la mayor producción de este elemento (CH4) se debe a microorganismos que metabolizan dihidrógeno (H2) y dióxido de carbono (CO2).
Todos los requisitos para la vida
La existencia de vida en Encélado no podrá ser confirmada hasta que enviemos una nueva misión de exploración. Sin embargo, los científicos están cada vez más convencidos de que su océano es habitable.
Hasta hace poco, en las muestras de agua de Encélado se había detectado cinco de los seis elementos presentes en todas las formas de vida en la Tierra: carbono, hidrógeno, nitrógeno, oxígeno y azufre.
Solo faltaba el fósforo, esencial para la formación de material genético, membranas celulares, huesos y otros componentes biológicos.
Hasta que en agosto de 2022 se publicó un estudio en PNAS, en el que un nuevo grupo de investigadores elaboró modelos geoquímicos basados en los datos obtenidos por Cassini sobre el océano interior de Encélado. De ese modo, lograron predecir que el lecho marino es rico en fósforo disuelto en minerales de fosfato.
“Hablamos de una concentración que es entre 100 y 1.000 veces mayor que la que se da en nuestros océanos terrestres”, señaló el autor Frank Postberg, de la Free University de Berlín, durante la conferencia Europlanet Science Congress.
“Lo que esto significa para la astrobiología es que podemos estar más seguros que antes de que el océano de Encélado es habitable”, dijo el coautor Christopher Glein del Southwest Research Institute (Texas, Estados Unidos).
“Necesitamos volver a Encélado para ver si este océano habitable está realmente habitado”, añadió.
Precisamente, una de las teorías más aceptadas para el origen de la vida en la Tierra es que los primeros microorganismos surgieron bajo las condiciones de calor, roca y agua que hay en las fuentes hidrotermales, como las que también existirían en el fondo del océano de Encélado.