Este tramo de la carretera Cochabamba – Santa Cruz tiene 30 kilómetros. El punto más crítico es el kilómetro 108, zona de Barros Negros.
El Sillar es el tramo de la carretera Cochabamba – Santa Cruz con una falla geológica a lo largo de 30 kilómetros, por lo que la nueva Doble Vía no anula sus efectos. Por esa ruta circulan cada día 6 mil vehículos, la mayoría de alto tonelaje.
El 23 de noviembre, la empresa china Sinohydro entregó provisionalmente la obra de la Doble Vía El Sillar a la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC). A dos semanas de aquella fecha, la carpeta asfáltica presenta fisuras y elevaciones, siendo el punto más crítico el kilómetro 108 de la carretera (kilómetro 8 de El Sillar), zona de Barros Negros.
La ABC realizó este jueves una inspección a la zona para explicar la situación a los medios de comunicación.
En el kilómetro 108, se cerró la vía de forma parcial para realizar los trabajos; y quedó un carril libre de bajada. Los carriles de subida tenían circulación normal.
“La carpeta asfáltica no está diseñada para aguantar estos eventos naturales. La carpeta asfáltica aguanta el tráfico. Aquí, es un conjunto de cosas que han provocado que la plataforma se vea afectada”, dijo, explicando que se trató de un evento natural, lo que no se puede predecir.
Describió que existe una quebrada más arriba que se desvió y se desconoce el porqué. Eso provocó infiltración en el talud y generó el movimiento en masa.
El jefe de Fiscalización del proyecto de la Doble Vía El Sillar de la ABC, Boris Baldivieso, enfatizó que se presentó “un evento natural extraordinario” y que fue mayor a lo que podría esperarse.
Ayer, operaban en el sector retroexcavadoras, volquetas y una veintena de personas.
Se preveía concluir el trabajo para reponer la carpeta asfáltica, además de analizar otras alternativas.
Los técnicos de la ABC manifestaron que se estima un tiempo de dos semanas para el movimiento de material en el sector.
Anunciaron que harán estudios y sondeos adicionales.