Disputa. Policías intentan liberar dos puntos de la Panamericana Sur en una dura lucha que dejó un policía herido de gravedad. Las marchas siguen en Lima y en Puno deciden llamar a sus reservistas.
Ica siguió siendo el centro de enfrentamientos entre manifestantes y la Policía Nacional, que trató de liberar los puntos bloqueados de la Panamericana Sur para que los vehículos de carga pesada puedan transitar. El choque entre protestantes y los agentes dejó heridos en ambas partes.
En la mañana, un contingente policial llegó al km 290 de la Panamericana, donde había un bloqueo. Se trataba de la zona La Expansión, en el distrito de Salas Guadalupe. Ahí, un grupo de personas intentó retirar las piedras del camino.
Sin embargo, en ese momento, aparecieron manifestantes que superaban en número a las fuerzas del orden. Reaccionaron lanzando piedras a los agentes, quienes respondieron con bombas lacrimógenas, pero se vieron obligados a retroceder.
Otro contingente policial se dirigió a Barrio Chino, en el km 262. En esta localidad también se produjeron fuertes enfrentamientos.
La lucha entre protestantes y agentes se prolongó por más de cuatro horas, sin que se pudiera liberar totalmente la carretera, ya que la turba hacía retroceder a las fuerzas del orden y volvían a obstruir la vía.
En momentos en que se logró un desbloqueo, la policía optó por no permitir el paso de los vehículos de carga pesada en previsión de cualquier acto de violencia contra estas unidades.
Producto de la escaramuza en Barrio Chino llegaron al Hospital Regional de Ica el PNP César Calixto Carhuallima (54), el bombero Javier Segura Coronado, agredido con piedras; Freddy Chanchary Yumi (19), con impacto de perdigones en la cabeza; y Saúl Enciso fernández (29), herido por proyectil de arma de fuego en el pecho.
A las 18:20 horas ingresó gravemente herido el PNP Joel Enrique Montañez Colque. Se refirió politraumatismo por agresión y traumatismo encéfalocraneano.
Mientras que al Hospital María del Socorro fueron conducidos el PNP Fernando Ortega Miranda, policontuso con herida expuesta en la cabeza, y también Sebastián Quispe Puchero, manifestante que reportaron como estable.
Puno se resiste al diálogo
Al llegar a la comunidad aimara de Antajahui, en el distrito de Laraqueri, asentado sobre la carretera Puno-Moquegua, los comuneros nos esperaron con una determinación irrevocable: no aceptar ningún tipo de diálogo con el Gobierno de la presidenta Dina Boluarte. Esto, por haber declarado que Puno no era el Perú y culpar a los pueblos en paro de tener financiamiento de la minería ilegal y el narcotráfico.
“Esta mujer maneja doble discurso, primero habla de diálogo, pero después manda soldados para desatar una guerra y eliminar a más peruanos. Después nos dice que nos financia el narcotráfico y la minería. Y después nos dice que Puno no es el Perú. Nos han discriminado y no habrá diálogo de ningún modo. Menos después de 21 puneños muertos. La huelga continúa hasta que se vaya, pase lo que pase”, aseguró a La República Nilo Rodríguez, poblador de Laraqueri.
Los comuneros permitieron que cerca de 500 soldados ingresen a la región Puno caminando. Sin embargo, las unidades militares permanecieron en la carretera varadas en la comunidad de Marcocollo. Los uniformados al mando de un comandante dieron media vuelta con dirección hacia Moquegua.
Advirtieron, además, que buscarían caminos alternos y que la única posibilidad de retornar a sus batallones era una orden del más alto nivel castrense.
Reaccionan ante presencia de militares
El arribo de militares y el exabrupto que tuvo Dina Boluarte, recrudeció las huelgas y el bloqueo de vías en el sur y norte del altiplano.
En Acora, Ilave, Juli, Pomata, Yunguyo y Desaguadero, se agudizó el bloqueo para hacer frente al posible ingreso de los soldados. En cada comunidad convocaron a sus reservistas con el fin de afrontar el intento de reabrir las carreteras. También decidieron no dialogar con el gobierno. Igual determinación tuvieron en Lampa, Putina, Melgar, Azángaro, Sandia, Carabaya, y otros.
El gobernador de Puno, Richard Hancco, señaló que la situación no da para más y reiteró que la única salida viable es que Dina Boluarte dé un paso al costado.
El dato
En Lima. Las movilizaciones no cesan. Cerca al mediodía, los manifestantes se dirigieron al distrito de Surco e hicieron un plantón en la Embajada de Estados Unidos. Luego volvieron al centro de Lima. Tras concentrarse en la plaza Dos de Mayo, prosiguieron con sus marchas. Esta vez no hubo violencia. La turba superaba en número a los agentes de las fuerzas del orden, quienes tuvieron que retroceder.
Fuente: LA REPÚBLICA