El destituido expresidente de Perú, Pedro Castillo, permanecerá detenido hasta junio de 2024 para ser investigado por su intento de golpe de Estado, mientras las protestas que piden el cierre del Congreso y el adelanto de elecciones ya dejan al menos 15 fallecidos. El informe desde Lima.
Las protestas no dan tregua. Se extienden a buena parte del Perú, con más fuerza en las zonas andinas, pero también en la capital.
Estallaron después de la destitución y detención del expresidente Pedro Castillo luego de su frustrado intento de cerrar inconstitucionalmente el Congreso.
El balance de muertos por estas protestas se eleva a 15 personas, justo en el día en que un juez accedió a un pedido de la fiscalía para mantener en prisión a Castillo preventivamente por 18 meses e investigarlo por rebelión y conspiración, tras un fallido autogolpe de estado el 7 de septiembre.
El magistrado consideró que existe “peligro de fuga” del exmandatario, quien trató de asilarse en la embajada de México en Lima tras el frustrado autogolpe.
Las manifestaciones demandan el adelanto de elecciones para que se vayan todos, una Asamblea Constituyente y algunos grupos la libertad de Castillo.
En las calles se escucha el rechazo al nuevo gobierno de la presidenta Dina Boluarte.
“A nosotros Dina Boluarte no nos representa, es una traidora, es una incapaz y ahorita tiene que estar presa porque ya hay muchos muertos en el país”, dice a RFI un manifestante en Lima.
El gobierno ha declarado el estado de emergencia y hasta el jueves había al menos diez muertos.
“Pedimos apoyo de la prensa internacional, porque cada vez que ustedes se van, la policía comienza a matar a todas las personas, les están disparando a quemarropa. Por favor, ayúdennos a que no maten más peruanos, por favor, no somos terroristas, no somos delincuentes. Nosotros lo que queremos es que se cierre el Congreso, porque el Congreso es corrupto”, dice Julissa Rojas.
La presidenta Boluarte anunció el adelanto de elecciones, primero de 2026 para abril de 2024, y después para diciembre de 2023. Pero la población, indignada con una clase política desacreditada, quiere nuevas elecciones antes de ese plazo.
Jack Conde, dirigente del magisterio, como lo era Castillo antes de ser presidente, participa en las protestas en Lima.
“Pedimos que se vayan todos los congresistas y el adelanto de elecciones lo antes posible. La señora Dina Boluarte, que la consideramos como la usurpadora, debería convocar para el mes de julio del año 2023 el adelanto de elecciones”, afirma.
Las protestas más fuertes, con miles de personas marchando en las calles, ocurren en el sur, donde se mantienen cerrados cinco aeropuertos (Andahuaylas, Arequipa, Puno, Cuzco y Ayacucho).
Ante las protestas, el gobierno de Boluarte declaró el miércoles un estado de emergencia por 30 días, lo que permite que las Fuerzas Armadas participen de la seguridad interna.
La situación también ha causado problemas diplomáticos a Perú, que este jueves llamó a consultas a sus embajadores en Argentina, Bolivia, Colombia y México en rechazo a su decisión de apoyar a Castillo.