El Tigre se impuso a los royalistas con facilidad, sin que en ningún momento este resultado esté en peligro y con un circuito de pases rompió a la defensa visitante para quedarse con los tres puntos, mientras, empujó al contrario a la zona del descenso indirecto de categoría.
El mal sabor de boca de la eliminación de la Copa Libertadores de América sigue en la afición aurinegra, que asistió en un número bajo al escenario de Miraflores. La herida sigue abierta, el receso en el cual ingresará el torneo servirá para olvidar las discrepancias y regresar con fuerza a la pelea por el título.
Miranda anotó el 1-0, a los 22 minutos, definiendo un pase de Luciano Ursino, tras una conexión con Michael Ortega, quien inició de titular para cumplir las funciones de eje, dando resultado y aumentando su crédito en las filas de los gualdinegros.
Antes de irse al descanso (48´), Ursino fue expulsado. Durante todo el segundo tiempo, el local jugó con diez hombres; sin embargo, esta ausencia no afectó en el rendimiento colectivo. The Strongest estaba intacto, y a tres minutos del inicio del complemento, Miranda aumentó la diferencia, aprovechando un pase de Abdiel Ayarza, quien se llevó por delante a los zagueros contrarios.
Ortega continuaría haciendo funcionar el sistema del equipo. Su recompensa fue el 3-0 con la definición desde el punto penal, ganando este duelo ante el arquero Diego Méndez, a los 61 minutos, cerrando el compromiso y regulando el tiempo y la energía.
El descuento de Royal Pari fue anotado por Matheus Alves, a los 77´, con un golpe de cabeza, tras un servicio de Schneider Peña, en una carrera iniciada por el costado, en el único descuido de los defensores aurinegros.
APG/MR
