Varias decenas de personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad, este martes 20 de junio en fuertes enfrentamientos entre manifestantes y policías en Jujuy, en el noroeste de Argentina. Los altercados se dieron mientras la legislatura provincial instauraba una nueva Constitución que penaliza algunas formas de protesta.
Piedras contra balas de goma y gases lacrimógenos frente al Parlamento de San Salvador de Jujuy. El martes 20 de junio estalló la violencia en el noreste de Argentina durante una protesta contra la aprobación de una reforma de la Constitución provincial, mientras los legisladores promulgaban el nuevo texto.
Organizaciones sociales, pueblos originarios y docentes se movilizaron afuera del edificio de la Legislatura provincial para protestar, luego de que se anunciara que el juramento de la nueva Carta Magna había sido adelantado a las horas de la mañana.
La represión policial estalló cuando activistas empezaron a lanzar piedras y cócteles molotov contra la guardia de infantería policial, que reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos a los manifestantes, según imágenes difundidas en diferentes canales de televisión. Una fuente del Ministerio de Seguridad de la provincia de Jujuy dijo a la agencia AFP que al menos 20 personas habían sido detenidas
Los medios locales informaron que decenas de manifestantes y policías resultaron heridos. Por su parte, el director del Servicio de Atención de Emergencias (SAME) de Jujuy estimó en la televisión ‘TN’ que entre 50 y 70 personas habían recibido asistencia médica, la mayoría por heridas leves causadas por piedras o balas de goma, y que sólo una persona se encontraba en estado grave con traumatismo craneal.
Los enfrentamientos se produjeron tras dos semanas de manifestaciones y cortes de rutas por parte de diversos sectores —funcionarios, docentes, miembros de comunidades indígenas— en protesta contra esta misma reforma de la Constitución provincial de Jujuy.
¿Qué contiene la reforma de la Constitución?
La provincia de Jujuy está gobernada por Gerardo Morales, precandidato a las elecciones presidenciales del próximo 22 de octubre, al frente de un sector del liberal Juntos por el Cambio, y opositor al Gobierno de Alberto Fernández.
Una convención constituyente de Jujuy aprobó el jueves pasado una reforma de la Constitución provincial que asegura el derecho a reunión y manifestación “cuando fueren pacíficos y sin armas”. El texto reconoce también la preexistencia de las comunidades originarias y pueblos indígenas, pero determina que el Estado es el encargado de reconocer su personería jurídica y la posesión comunitaria de las tierras.
La nueva Constitución provincial ha sido rechazada en particular por los representantes de las comunidades indígenas locales, que consideran que menoscaba sus derechos sobre sus tierras tradicionales y los recursos naturales de esta provincia rural y turística, rica también en litio
Morales anunció el lunes que retiraba dos artículos sobre este punto para volver a discutirlos, teniendo en cuenta las dudas de las comunidades indígenas. Pero el nuevo texto fue aprobado el martes por la legislatura local en su forma parcial.
Otro aspecto controvertido del nuevo texto prevé restricciones a las formas de protesta social, incluida la prohibición de bloquear carreteras y ocupar edificios públicos.
La oposición apuntó al kirchnerismo por los incidentes
El gobernador de Jujuy señaló en su cuenta de Twitter al presidente argentino, Alberto Fernández, y a la vicepresidenta, Cristina Fernández, como responsables “de la extrema violencia que se está viviendo en la provincia de Jujuy”. Además, publicó videos de un canal de noticias que muestran los incidentes.
El mandatario argentino respondió en sus redes sociales, diciendo que Morales “es el único responsable de haber llevado” a la “querida provincia de Jujuy a esta situación límite, tratando de imponer una reforma constitucional que no respeta la Constitución Nacional”.
“Una reforma que desatiende acuerdos internacionales, no escucha a los pueblos originarios y niega el derecho a la protesta” escribió el presidente argentino, que exigió al gobernador el cese inmediato de la represión en Jujuy.
Por su parte, la vicepresidenta también contestó a las acusaciones de Morales en su cuenta de Twitter: “Hágase cargo gobernador Morales y pare con la locura represiva que su propio accionar ha desatado. Lo que está sucediendo en la provincia de Jujuy es absoluta responsabilidad suya y usted lo sabe”.
Otros dirigentes de la oposición en Argentina, como Horacio Rodríguez Larreta, acusaron este martes a los seguidores de la vicepresidenta por los violentos incidentes. El precandidato presidencial y alcalde de Buenos Aires tuiteó: “Lo que está pasando en Jujuy es la muestra de lo que es capaz el kirchnerismo resistiéndose al cambio”.
También señaló: “Este tipo de violencia antidemocrática es la que vamos a encontrar a partir del 10 de diciembre cuando empecemos a transformar la vida de los argentinos para siempre”.
Reacción de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
En un comunicado emitido el martes, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su preocupación por las medidas adoptadas para dispersar las manifestaciones en la provincia argentina de Jujuy.
La CIDH llamó al Estado argentino a respetar “el derecho a la libertad de expresión”, los “estándares interamericanos del uso de la fuerza”, durante las protestas y a llevar a cabo un “proceso de diálogo efectivo”.
Fuente: FRANCE24
