Payton Washington, de 18 años, se encuentra en terapia intensiva. Es el tercer caso de violencia armada “por error” en el país en menos de una semana
La pequeña ciudad de Elgin, en el estado de Texas, está conmocionada por un nuevo y estremecedor caso de la violencia armada en Estados Unidos que dejó a dos jóvenes heridas de bala, una de ellas hospitalizada en estado crítico.
La reconstrucción del hecho narrada por testigos señala que un hombre de 25 años, identificado como Pedro Tello Rodríguez, abrió fuego indiscriminadamente contra cuatro porristas en un estacionamiento luego de que una de ellas intentara entrar a su auto por error creyendo que era el suyo.
Cuando se confundió y abrió una puerta del vehículo donde se encontraba Tello sentado en el asiento del acompañante, se asustó creyendo que era un extraño en su auto y volvió corriendo hacia donde estaban sus amigas.
Segundos después Tello salió por la puerta del acompañante y se dirigió hacia el vehículo estacionado donde estaban las cuatro chicas. Roth dijo que ella bajó la ventanilla para disculparse y entonces el hombre levantó las manos, sacó una pistola y les disparó.
La Policía informó que Roth fue rozada por una bala y recibió primeros auxilios en el lugar. Pero las mayores plegarias están dirigidas hacia su compañera de equipo Payton Washington, de 18 años, que fue herida en la espalda y una pierna y fue trasladada en estado crítico a un hospital donde fue operada para quitarle parte del bazo, según informó KTRK.
Pedro Tello Rodríguez Jr. escapó de la zona tras los disparos pero fue detenido horas después gracias a las filmaciones de cámaras de seguridad en el estacionamiento. Al momento del arresto, vestía la misma ropa que tenía durante el ataque armado. Fue acusado de conducta mortífera y la Policía señaló que un video captó el momento del incidente pero no lo ha hecho público.
Kelan Washington, padre de la joven hospitalizada, dijo a la prensa local que las otras jóvenes están “bien” tras lo ocurrido y apoyan a su hija. “Son familia. Son las hermanas de Payton básicamente en espíritu y en camaradería de equipo”, dijo, según un reporte de la cadena NBC. Y aclaró: “Por supuesto que están muy preocupadas por su hermana, están muy preocupadas por su líder. Payton era la líder de este equipo de animadoras en Houston”.
El padre también dijo que Payton Washington, que nació con un solo pulmón, ahora se encuentra estable en la unidad de cuidados intensivos del Centro Médico Dell Seton de la Universidad de Texas en Austin. “Ha logrado todo lo que tiene con un solo pulmón desde que nació. Es muy fuerte”, afirmó. Se espera que a lo largo de la semana se someta a cirugías adicionales.
Felecia Mulkey, entrenadora de la compañía de porristas, la visitó en el centro médico el martes. “No tengo ninguna duda de que va a superar esto. Mis oraciones están con Payton y sus compañeras de equipo, que estuvieron involucrados en el trágico suceso. Sé que las heridas mentales también dejan cicatrices”, declaró Mulkey, según reportó la cadena ABC.
Una campaña en la página web GoFundMe recaudó unos USD 90.000, hasta el miércoles por la tarde, para cubrir los gastos médicos de la recuperación de Payton.
Este incidente armado se convierte en el tercer caso en el que una persona es “baleada por un error” en menos de una semana en Estados Unidos y en un contexto donde la sociedad y el gobierno exige cada vez más que se imponga un mayor control de las armas.
La noche del jueves pasado, Ralph Yarl, de 16 años, tocó el timbre en la casa equivocada en Kansas City cuando fue a buscar a sus dos hermanos menores y el dueño de la vivienda, un hombre de 84 años, le disparó en la cabeza y en un brazo. El agresor, Andrew Lester, fue acusado de asalto en primer grado y acción criminal armada.
Y el sábado pasado, Kaylin Gillis murió luego de que su vehículo irrumpiera por accidente en el camino de entrada a la casa de un hombre de 65 años. La joven de 20 años estaba intentando dar vuelta al auto cuando Kevin Monahan salió a la terraza, realizó dos disparos y uno de ellos impactó en Gillis.
Según un reciente informe de Amnistía Internacional, se calcula que hay más de 400 millones de armas entre la policía, el ejército y los civiles en Estados Unidos, un país de unos 330 millones de habitantes.
Fuente: INFOBAE
