Entre un 20 y un 48% de los adultos españoles tiene problemas a la hora de conciliar o mantener el sueño. Conseguir un sueño restaurador es esencial para la supervivencia. No dormir bien y lo suficiente reduce la calidad de vida y aumenta el riesgo de hipertensión. Además, baja la concentración, puede provocar problemas de aprendizaje y aumenta el tiempo de reacción, ya que la falta de sueño altera nuestras funciones cognitivas.
El tiempo de sueño depende del estilo de vida, la salud y el descanso de cada persona. Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos los recién nacidos deben dormir entre 16 y 18 horas al día; los niños en edad preescolar de 11 a 12 horas; los niños en edad escolar al menos 10 horas; entre 9 y 10 horas para los adolescentes; y alrededor de 7 u 8 horas para los adultos y mayores. Numerosos estudios demuestra la importancia de dormir bien. Según el último informe de la revista “Journal of Neurology Neurosurgery & Psychiatry” el sueño insuficiente durante la adolescencia puede aumentar el riesgo de desarrollar esclerosis múltiple en la edad adulta.
Por otra parte, existen numerosos factores que influyen en la calidad del sueño, como la temperatura de la habitación, el ruido, la luz, algunos alimentos o el uso de dispositivos electrónicos antes de acostarse. Estas circunstancias pueden ser modificadas para conseguir un sueño reparador. Así, se recomienda acostarse y levantarse a la misma hora, no tomar cafeína, bebidas alcohólicas ni cenas copiosas así como realizar alguna actividad física y mantener alejados los dispositivos tecnológicos.
Seguir rutinas antes de irse a la cama también ayuda a dormir, rituales como leer un libro, escuchar música relajante o meditar preparan al cuerpo y la mente para el descanso.
Además de estos consejos, existen algunas técnicas para conciliar el sueño de forma más rápida y no pasar demasiado tiempo dando vueltas en la cama sin poder dormir. La doctora Daisy Mae ha publicado un truco con el que asegura que comenzará a dormir en pocos minutos. Se trata de forzarse a permanecer despierto. Según la médico británica, lo que hay que hacer es acostarse y mantener los ojos abiertos mientras se repite “no te duermas”. Este técnica de “intención paradójica” consigue “engañar” a la mente al desafiarte a permanecer despierto, lo que provocará facilitar el sueño.
Otra forma de intentar solucionar el problema es la regla del sueño en 15 minutos. La guía publicada por el Departamento de Neurociencias Clínicas de Nuffield sugiere que lo mejor que se puede hacer en esos casos es levantarse de la cama: “Si nota que no está dormido dentro de los 15 minutos posteriores a irse a la cama, intente levantarse de la cama, ir a otra habitación y seguir una rutina de relajación hasta que se sienta cansado y listo para volver” a la cama para dormir.
“Los músculos de tus ojos deberían cansarse rápidamente y, con suerte, estarás dormido en poco tiempo”, dijo.
dijo que si bien puede sonar como un truco peculiar, una de las mejores maneras de dormir es forzarse a permanecer despierto.
El experto en sueño, que trabaja con Get Laid Be ds, dijo que el nombre médico para esto es intención paradójica.
“En realidad, hay una frase para describir esto, que es ‘intención paradójica’, que es cuando te desafías a ti mismo a permanecer despierto, lo que engaña a la mente para que se duerma.
Fuente: LA RAZON ESPAÑA