* Piden el cambio del Vicerrector y la posesión del Comité Electoral, entre otras demandas
Estudiantes de la Universidad Nacional “Siglo XX” (UNSXX) instalaron una vigilia permanente frente al rectorado en Llallagua, exigiendo la atención inmediata a un pliego petitorio de 15 puntos.
La movilización, liderada por la Federación Universitaria Local (FUL), también cuenta con el respaldo de estudiantes provenientes de extensiones académicas en otros centros mineros del norte de Potosí.
Entre las principales demandas se encuentran el cambio del vicerrector, la posesión del comité electoral, mejoras en el comedor y albergue universitario, incremento de becas, seguro de salud, y la convocatoria a claustros para elegir nuevas autoridades.
También exigen transparencia en el manejo presupuestario y la atención a las necesidades específicas de cada carrera.
El conflicto se agudizó luego de que el Consejo Universitario, previsto para el 25 de julio, no se instalara debido al retiro del estamento estudiantil. Las autoridades universitarias, encabezadas por el rector Fortunato Laura, lamentaron el abandono del encuentro y reiteraron su disposición al diálogo.
Sin embargo, señalaron que la participación del ejecutivo de la FUL, Juan Daniel Mamani, fue objetada por un “veto” emitido por la Federación de Mineros de Bolivia durante su último congreso.
Mamani, por su parte, calificó el veto como “ilegal” y contrario al estatuto orgánico de la UNSXX, que establece que cualquier falta cometida por un estudiante debe ser tratada dentro del marco institucional universitario.
“No existe ninguna resolución interna que justifique este tipo de sanción externa”, declaró.
Durante la jornada del lunes 28 de julio, se intentó una mesa de diálogo con presencia de autoridades universitarias y representantes de la Federación de Mineros del Norte de Potosí; pero no se logró ningún acuerdo. Ante la falta de respuestas concretas, los estudiantes decidieron continuar con las medidas de presión.
CONTEXTO Y CIFRAS
La Universidad Nacional Siglo XX, fundada en 1985 en el corazón del distrito minero de Llallagua, cuenta con más de 7.000 estudiantes distribuidos en su sede central y extensiones académicas.
Es una de las pocas universidades públicas del país con fuerte vinculación al movimiento obrero, especialmente al sindicalismo minero, lo que históricamente ha influido en su estructura de gobernanza.
Según datos del Ministerio de Educación, el 68% de los estudiantes de la UNSXX provienen de familias de bajos recursos, y más del 40% accede a becas de trabajo o alimentación.
La demanda de mejoras en servicios básicos como comedor, albergue y seguro médico refleja una necesidad estructural de atención a la población estudiantil vulnerable.
El conflicto actual se da en un contexto de tensiones sociales en la región, donde recientemente se han registrado bloqueos y enfrentamientos por demandas políticas y sociales.
Las autoridades universitarias han pedido evitar la escalada del conflicto y priorizar el diálogo.