- Se habla de que no existe consulta previa, que no se cumplen condiciones ambientales o que no se está considerando el tema de los acuíferos
Potosí, Kollauyo Digital
El presidente del Estado, Luis Arce Catacora, ayer que su gobierno no ejerce ningún tipo de presión sobre la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) para la aprobación de los contratos suscritos con empresas de China y Rusia para la industrialización del litio boliviano.
A través de un mensaje publicado en sus redes sociales, el mandatario subrayó que su administración asume con responsabilidad el desafío de industrializar el litio, recurso estratégico para el futuro energético del país. “Para ello convocamos a las empresas más prestigiosas del mundo, recibiendo un interés sin precedentes de más de 21 compañías internacionales”, señaló.
Según Arce, como resultado de este proceso, entre 2023 y 2024 se firmaron 14 convenios de validación tecnológica y estudios preliminares con socios estratégicos. Estos acuerdos, según explicó, sentaron las bases para la firma de dos contratos en 2024 que —afirmó— son “sumamente favorables para Bolivia”, al garantizar la soberanía sobre el recurso y una participación mayoritaria del Estado en toda la cadena productiva y comercial.
El Presidente también aclaró que su gobierno cumplió con lo establecido por la ley al remitir dichos contratos a la Asamblea Legislativa para su tratamiento. Sin embargo, indicó que la ALP decidió aplazar el análisis hasta febrero de 2025 con el fin de realizar una socialización más amplia. “Aclaramos que nuestro Gobierno no ejerce ningún tipo de presión para la aprobación de esos contratos. Es la Asamblea Legislativa Plurinacional la que debe cumplir con sus tiempos y procedimientos para debatir, aprobar o rechazar los contratos en el marco de sus atribuciones constitucionales”, explicó.
Totalmente politizado
Por su parte, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo, cuestionó el tratamiento legislativo de los contratos, al considerar que el tema está “totalmente politizado” dentro del Parlamento. “Se habla de que no existe consulta previa, que no se cumplen condiciones ambientales o que no se está considerando el tema de los acuíferos. Son argumentos incorrectos que solo buscan desinformar”, manifestó.
Gallardo recordó que los acuerdos firmados por Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) con las empresas rusa Uranium One Group y la china CATL BRUNP & CMOC operan desde 2021 y pasaron por diversas fases técnicas antes de ser presentados para su aprobación legislativa.
El ministro advirtió que si los actuales legisladores no asumen su responsabilidad, podrían trasladar la decisión a la próxima Asamblea Legislativa, “cargando con el peso de no haber hecho su trabajo”. También precisó que los contratos permitirán el uso de apenas el 1,64% de los 21 millones de toneladas certificadas en el salar de Uyuni, utilizando la tecnología EDL (Extracción Directa de Litio).
Gallardo también destacó el contexto global en el que Bolivia debe tomar decisiones estratégicas. “Hasta el año 2032 el mundo alcanzará la cúspide de producción de combustibles fósiles. Es ahí donde tecnologías emergentes como la electromovilidad, el hidrógeno verde y el litio jugarán un papel clave”, apuntó.
En medio de esta controversia, la Asamblea Legislativa reinstaló el miércoles la sesión para tratar los contratos, tras un cuarto intermedio sin fecha ni hora. Sin embargo, las posiciones críticas de legisladores evistas y de oposición continúan obstaculizando el debate.
“Se supone que son los ‘padres de la Patria’, personas electas para representar a sus regiones y velar por el bienestar de todos los bolivianos”, concluyó el ministro.