Bajo un ambiente enrarecido, se llevó adelante este compromiso en su recta final. Totora Real Oruro pasó por encima de Royal Pari durante el primer tiempo, con la conquista de los tres goles, a un gol de empatar la llave e ir a los lanzamientos penales o buscar más tantos para remontar la diferencia.
Ante los errores imperdonables de la defensa, Totora Real Oruro humilló a Royal Pari en el primer período con Alexis Bravo, a los nueve minutos; Francisco Ojeda, a los 34´, y Gustavo Ribeiro, a los 38 minutos. En el complemento, una dudosa mano de Lázaro Crescencio fue sancionada con una mano por el árbitro Gabriel Mendoza (La Paz). El balón estaba en el punto penal, listo para la ejecución.
Sin embargo, de manera extraña, primero el utilero interrumpió, y luego el entrenador mexicano De la Torre ingresó al campo de juego, ordenó a sus jugadores a abandonar el campo de juego como protesta por la infracción cobrada. En ese momento, los policías, sin dudar, ingresaron al terreno para pedir a De la Torre que salga del campo, el director técnico siguió pidiendo a sus futbolistas que dejen la cancha.
Hubo un cruce de palabras en ese tumulto, con insultos de los visitantes contra los oficiales del orden. El plantel salió en defensa de su entrenador, los policías escoltaron a De la Torre, junto a los jugadores hasta que se roció gas lacrimógeno, afectando a los royalistas, en su camino hacia el vestuario.
Después de minutos de incertidumbre, pidiendo que los jugadores de Royal Pari vuelvan al terreno, el equipo arbitral se fue al vestuario, delegados de ambos lados, estaban haciendo llamadas hasta que el veedor del encuentro anunció que el partido había sido dado por terminado por el abandono del equipo cruceño, dando cumplimiento a las indicaciones de Mendoza.
Totora Real Oruro estuvo en el campo esperando una palabra oficial, hasta que fue notificado con el abandono de los visitantes, en aplicación del reglemento, con el artículo 74 por delante. Recién comenzó con la celebración.
APG/FP mr