- Compras de pánico y reducción del transporte marcan la jornada; campesinos dan 24 horas al Gobierno para abrogar el Decreto 5503
Potosí, Kollasuyo Digital
El municipio de Betanzos amaneció este jueves en medio de incertidumbre y preocupación, luego del anuncio oficial de la nivelación de precios de la gasolina y el diésel, una medida que comenzó a generar un fuerte impacto en la vida cotidiana de las familias betanceñas.
Desde tempranas horas, transportistas locales acudieron a los surtidores del municipio, donde enfrentaron dificultades para abastecerse de combustible bajo la nueva estructura tarifaria. Esta situación provocó una reducción inmediata en las salidas del transporte público hacia la ciudad de Potosí, mientras los dirigentes del sector sostienen reuniones de emergencia para definir el nuevo costo de los pasajes, anticipando un incremento que afectará directamente a los usuarios.
De manera paralela, el temor a una subida generalizada de precios derivó en compras de pánico en los centros de abastecimiento. Amas de casa adquirieron de forma masiva productos de la canasta básica como arroz, azúcar, fideo y aceite, ante el riesgo de que los precios se incrementen considerablemente debido al alza en los costos de transporte.
La respuesta social y política no se hizo esperar. El ejecutivo de la Federación de Campesinos de Potosí, señor Serrano, anunció una conferencia de prensa de emergencia en la plaza principal de la capital potosina, acompañado por representantes de las Bartolinas, centrales y subcentrales provinciales.
El sector campesino expresó su rechazo contundente al Decreto Supremo 5503, calificándolo como una medida que golpea directamente a la economía de la población rural y de las familias que viven del día a día.
“Ese decreto verdaderamente nos va a afectar muchísimo. Como Federación de Campesinos, si el presidente Rodrigo Paz no abroga esa norma, vamos a salir a las calles; seguramente habrá bloqueo de caminos o iniciaremos una marcha hacia La Paz”, advirtió el dirigente.
El plazo otorgado al Ejecutivo vence mañana, 19 de diciembre. De no existir una respuesta favorable, no se descarta que el departamento de Potosí quede aislado por bloqueos, sumándose a las movilizaciones anunciadas por las cooperativas mineras del Norte Potosí.
Mientras tanto, la población permanece en estado de alerta, en contraste con la postura del Gobierno, que defiende la medida como necesaria para frenar el contrabando y estabilizar la economía, aunque en municipios como Betanzos se percibe un escenario de crisis inminente.
