En Warnes las autoridades confirmaron el deceso de dos personas y al menos 20 desaparecidos. Mientras que en Montero, donde la riada llegó esta madrugada, hay más de 500 familias damnificadas
Las inundaciones provocadas por las intensas lluvias y el desborde del río Piraí golpean con fuerza a los municipios de Warnes y Montero, donde autoridades locales confirmaron personas fallecidas, decenas de desaparecidos y cientos de familias evacuadas. En medio del drama, el alcalde de Warnes, Carlos Montaño, pidió entre lágrimas la intervención directa del Gobierno nacional y el envío urgente de helicópteros para rescatar a personas que quedaron atrapadas.
“Quiero pedir ayuda al presidente para rescatar a las personas que están desaparecidas. Necesitamos helicópteros”, clamó Montaño durante una visita a la zona de Gran Paitití, una de las más afectadas por las riadas. La autoridad municipal repartió alimentos a los damnificados y aseguró que el Gobierno Municipal garantizará albergue temporal para las familias que perdieron sus viviendas o debieron evacuar de emergencia.
Warnes con fallecidos y albergues colapsados
El jefe de la Unidad de Gestión de Riesgos de Warnes, Ronald Rivera, informó que el municipio enfrenta una situación crítica que ha sobrepasado su capacidad operativa. “La maquinaria ya no es suficiente. Hemos movilizado a todo el personal municipal, pero esto nos ha sobrepasado”, admitió.
Rivera confirmó dos personas fallecidas en el municipio y estimó que hay entre 15 y 20 personas desaparecidas, además de dragueros atrapados por la crecida. Las zonas más golpeadas son Valle Sánchez, Paitití, Terracor y el centro de Warnes, donde el agua incluso inundó el parque ecológico y áreas urbanas.
Ante la emergencia, la Alcaldía habilitó albergues en el coliseo de Guajoyo, donde ya se acoge a cerca de 300 personas, y en la unidad educativa Ignacio Warnes, con provisión de colchonetas y alimentación. “Lo primero es resguardar la vida”, remarcó Rivera, al reiterar el pedido de ayuda a la Gobernación y al Gobierno central.
Montero también evacua a cientos de familias
La emergencia se extendió a Montero, donde el subgobernador de la provincia Obispo Santistevan, Juan Carlos Maciel Núñez, confirmó el desborde del río Piraí en sectores como Villarreal 2 y San Francisco. “Lo primero es resguardar la vida humana y llevar a la población a lugares seguros”, señaló, al informar que ya se habilitaron coliseos como centros de acogida y brigadas médicas para atender a niños y familias afectadas.
Maciel pidió a la población despejar las vías para facilitar el trabajo de rescate y recordó que, conforme a la Ley 602, primero actúa el municipio, luego la Gobernación y, si la situación los sobrepasa, el Gobierno nacional.
Vecinos de Montero denunciaron que entre 400 y 500 viviendas quedaron inundadas en la zona de Sidral y cuestionaron la falta de obras preventivas. “Todos los años sufrimos lo mismo. ¿Por qué esperamos a que llegue la lluvia para recién actuar?”, reclamó un afectado, mientras el agua le llegaba hasta la cintura.
El alcalde de Montero, Regys Medina, supervisó los trabajos con maquinaria pesada en sectores como la avenida Carlos Puma y el Sidral. “Estamos haciendo fuerza entre todos para que el agua evacúe. Todavía hay familias que no quieren salir y también hay animales, pero estamos tratando de que saquen sus cosas”, afirmó.
Vecinos como María Elena, de barrios como Nuevo Amanecer II, San Diego, Santa Rosa y Nazaret, coincidieron en que se trata de una crecida poco habitual. “Hace años no se veía algo así. Ahora estamos evacuando con la maquinaria para que el agua se direccione al canal grande”, explicó.
Las autoridades reiteraron el llamado a la población a priorizar la vida, evacuar las zonas de riesgo y seguir las alertas, mientras continúan las labores de rescate y asistencia en medio de uno de los peores episodios de inundaciones registrados en el norte cruceño en los últimos años.
Fuente: El Deber

