* La rotura de cañerías, la turbiedad en época de lluvias y las fallas en el sistema de bombeo también atentan contra la distribución del líquido vital
Potosí, Kollasuyo Digital
La escasez de agua potable en el municipio de Betanzos, ubicado en la provincia Cornelio Saavedra del Departamento de Potosí, se convirtió en un problema estructural que afecta a miles de familias.
A pesar de las promesas electorales y esfuerzos puntuales, la población continúa recibiendo agua día por medio, confirmó Marlene Tito, administradora de la Asociación de Usuarios de Agua y Alcantarillado (ASUAPA).
El suministro proviene principalmente de las vertientes Trapiche y Mayutambo; pero las interrupciones por rotura de cañerías, turbiedad en época de lluvias o fallas en el sistema de bombeo generan malestar constante en los barrios. “Cuando llueve, el agua se vuelve turbia y se cierra la toma de Villa Trapiche. Además, la red principal atraviesa propiedades privadas, lo que complica su mantenimiento”, explicó Tito.
Proyectos en marcha y desafíos pendientes
En junio de 2025, el Gobierno Nacional entregó dos sistemas de agua en Betanzos, beneficiando a 421 familias productoras y más de 1.100 cabezas de ganado, con una inversión de Bs 549.505. Además, se firmó un convenio para la construcción del sistema de alcantarillado en la zona Quivi Quivi Lourdes.
Sin embargo, la administración municipal, encabezada por el alcalde Julio Cava, ha advertido que la totalidad de las comunidades del municipio están afectadas por la sequía, y se prepara una declaratoria de zona de desastre para acceder a recursos de emergencia.
Promesas incumplidas y exigencia ciudadana
La población de Betanzos expresa su frustración ante la falta de soluciones sostenibles. “Los candidatos prometen agua en campaña; pero una vez en el cargo, esas promesas se olvidan”, lamentan vecinos de barrios afectados.
La distribución interdiaria sigue siendo la única alternativa para paliar la escasez, mientras se espera que los proyectos estructurales se concreten.