El elenco orureño regresó a la competencia con brío y determinación, haciendo valer su condición de dueño de casa en la primera media hora, con el concurso de Vásquez, quien fue rodeado por los aplausos de la afición, porque en este lapso anotó dos goles y en el complemento registró el triplete.
Con esta victoria, Gualberto Villarroel camina solo en la quinta posición, con 17 puntos, y dejando a Guabirá con 11 de puntaje. El entrenador Alberto Illanes regresó a la ciudad de Sebastián Pagador, comandando a la delegación de los Diablos Rojos, pasando una mala noche, porque los locales pasaron por encima en el campo.
El primer gol de Gualberto Villarroel llegó a los diez minutos, con Vásquez ingresando cerca del segundo palo para empujar una asistencia al ras de Jhoni Ramallo, delante de una defensa sin convicción en la marca.
Con una triangulación, la pelota llegó al área rival para que Vásquez defina delante del arco con un remate de la cara interna del pie derecho, a los 29 minutos (2-0). Era amplia la diferencia entre los equipos.
La obstrucción por los costados era nula de parte de Guabirá. Un desborde de Ramallo finalizó en el 3-0, a los 44´, cuando Bruno Vides empujo un centro corto y en el primer palo, delante del arco, sin ningún defensor que le incomode.
El descuento fue firmado por Santiago Paiva, a los 62´, empujando un centro de Gustavo Peredo, peleando, desde el suelo, por el control de la pelota, ante una floja resistencia del arquero Roberto Rivas.
Este tanto del descuento sólo fue una ilusión, porque Gualberto Villarroel volvería a ampliar la cuenta, por intermedio de Vásquez, a los 67 minutos. De nuevo, el delantero recibió el balón sin marcación, un pase largo que bajó con seguridad, enganchó para afuera, dejando a un lado al arquero Jairo Cuellar, y con la zurda mandó la pelota contra las redes, cerrando la goleada.
APG/FP mr
