El Tribunal de alzada rechazó la apelación presentada por la defensa del alcalde de Potosí, Jhonny Llally, quien continuará en detención preventiva en el penal de Cantumarca. La decisión judicial se mantiene firme, a pesar de los esfuerzos legales de su equipo de abogados para revertir la medida.
Llally, quien enfrenta un proceso legal, actualmente se encuentra internado en un centro médico debido a complicaciones relacionadas con su diabetes. Aunque su estado de salud ha sido motivo de preocupación, las autoridades judiciales determinaron que no existen fundamentos suficientes para modificar la medida de detención preventiva que se le impuso hace más de una semana.
El alcalde había retomado la medida de encierro tras una decisión judicial previa, la cual fue apelada por su defensa. Sin embargo, este miércoles, el Tribunal de alzada resolvió mantener la detención, lo que significa que Llally permanecerá en prisión mientras continúa el proceso en su contra.
Mientras tanto, el concejal Waldo Porcel asumió de manera interina el cargo de alcalde de Potosí. Porcel ya posesionó a su equipo de trabajo y se encargará de las funciones administrativas de la municipalidad durante la ausencia de Llally.
El caso ha generado atención en la región, tanto por la figura pública involucrada como por las implicaciones legales y políticas que conlleva. Las autoridades judiciales han reiterado que la decisión de mantener la detención preventiva se basa en los fundamentos del caso, sin que el estado de salud del alcalde sea un factor determinante para modificar la medida.