El jefe de Asuntos Humanitarios de la ONU, Tom Fletcher, ha afirmado este jueves desde la Franja de Gaza que la magnitud de la destrucción en el enclave y el sufrimiento de los palestinos supera sus “peores temores”.
Fletcher ha explicado que desde que entró en vigor el alto el fuego entre Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) el 19 de enero, los trabajadores humanitarios están movilizando ayuda masiva para los supervivientes, incluidos alimentos, agua, tiendas de campaña o medicamentos.
Su oficina está trabajando, en particular, para mejorar el acceso a agua en toda la Franja, puesto que “la gente gazatí está desesperada por conseguir agua potable”. “Un abuelo me dijo que lo único que le quedaba de vida era su bidón y el agua que contenía”, ha relatado.
En el norte, solo un pozo de agua, gestionado por la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA), sigue en funcionamiento.
Fletcher se ha desplazado asimismo hasta los hospitales, que también han sido objetivo constante de los bombardeos israelíes. “Historias desgarradoras de pacientes y médicos en Gaza. Al Awda fue el único hospital que logró permanecer abierto en el norte. Un médico asesinado allí dejó un mensaje que decía: ‘Díganles que hicimos lo que pudimos'”, ha relatado.
Por otro lado, ha visitado algunas de las oficinas de la ONU en Gaza y ha mostrado imágenes del estado de los edificios, completamente en ruinas. Desde allí, ha rendido homenaje a aquellos miembros que han continuado trabajando, “a pesar de que muchos perdieron sus hogares y sus familias”.
Las autoridades que controlan la Franja de Gaza siguen informando diariamente de muertos pese al alto el fuego y este jueves han elevado a 47.583 el balance provisional de fallecidos desde el inicio de la ofensiva lanzada por Israel en octubre de 2023, a raíz de los atentados perpetrados por Hamás.
Fuente: EUROPA PRESS
