La situación económica empieza a estrangular a algunas empresas. Marisol Guzmán Singuri, vicepresidenta de la Federación de Empresarios Privados de Potosí, lanzó una advertencia inquietante: muchas empresas no tienen garantizado el pago del aguinaldo, un reflejo claro de la asfixiante crisis económica que atraviesa el país.
Según Guzmán, varias compañías están recurriendo a préstamos bancarios con intereses desorbitantes para cumplir con esta obligación laboral. “Estamos sacrificando nuestra estabilidad futura por una solución momentánea”, expresó, dejando entrever la desesperación que sienten muchos empresarios.
La situación, sin embargo, podría empeorar. Guzmán Singuri vaticina que Bolivia se encamina hacia un escenario económico crítico, similar al vivido durante la Unión Democrática y Popular (UDP) en los años 80. “Las filas interminables para el combustible son solo el principio. Pronto estaremos como antes, haciendo colas para un balde de agua”, advirtió con evidente preocupación.