En la Luna el tiempo pasa más rápido que en la Tierra: 58,7 microsegundos cada día. Si se pusiera un reloj en la superficie del satélite y otro en la Tierra, en unos 50 años el lunar marcará un segundo más que el terrestre. Aunque parece poco, los científicos de la Casa Blanca consideran que es necesario crear un estándar horario propio para el satélite. Afirman que una mayor precisión al medir el tiempo garantizará más seguridad de la navegación y fiabilidad de las comunicaciones. Por ello, han dado instrucciones a la NASA para que antes de que finalice 2026 cree el Tiempo Lunar Coordinado (LTC), una hora unificada que esperan que sea adoptada por todos los países y empresas privadas que exploren el satélite.
Fuente: EL PAÍS