La jornada uno de la movilización liderada por Morales no ocultó el propósito de los “radicales”. Eduardo del Castillo acusó que Evo no perdona que el Gobierno destruyera fábricas de droga.
La Marcha para salvar a Bolivia encabezada por Evo Morales abrió ayer con violencia, provocaciones entre “evistas” y “arcistas”, pedidos-amenazas de adelantar las elecciones y personas con lesiones.
Aquella movilización, que tenía el propósito de exigir carburantes, mayor circulación de dólares y una canasta familiar más módica, tomó tintes extremos, al punto de que los protestantes llegaron a pedir que se anticipen los comicios generales.
Los “evistas” expusieron su propósito de fondo. “Esta marcha va a continuar (…), ahora sí, nosotros, públicamente digo, ahora sí va a tener que convocar a elecciones generales. No queda de otra”, apuntó, sin rodeos, Ponciano Santos, parte de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos (Csutcb) afín a Morales.
A dichas consignas han respondido los “renovadores”, quienes aguardaron la marcha, que partió desde Caracollo y tiene previsto arribar a la sede de Gobierno, y protagonizaron escenas violentas.
En Vila Vila, los militantes de ambos bandos se enfrascaron en peleas con hondas, petardos y dinamitas. Hubo heridos. Según los “evistas”, al menos siete sufrieron lesiones. Se trataría de los asambleístas Guido Varela y Luis Adolfo Flores, la dirigente pandina Alina Guzmán, Gabriel Navi y otras mujeres. Este grupo habría sido interceptado en un puesto de control cuando se desplazaba en un motorizado.
En consonancia con la versión de la Defensoría del Pueblo, 17 personas sufrieron heridas. El defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, informó que las víctimas son legisladores e incluso policías, mismos que han sido trasladados a centros de salud para que fueran atendidos. Además, dio cuenta de agresiones contra trabajadores de la prensa.
OPOSICIÓN NO APOYA Actores políticos de la oposición no comulgan con la idea de que Luis Arce acorte su mandato. Desde Comunidad Ciudadana (CC) y Creemos rechazaron esa posibilidad. El diputado de Creemos Erwin Bazán manifestó: “No somos de la idea de adelantar elecciones por una sencilla razón: adelantar las elecciones en este momento es hacerle un favor al Movimiento al Socialismo, que siempre pesca en río revuelto, que siempre busca el caos para sacar tajada”.
Por su lado, José Ormachea, de CC, señaló que esa alianza no contempla ni acortar ni prolongar mandatos.
LO RELACIONA CON LA DROGA El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, apuntó contra Evo y mencionó que el excocalero no perdona al Gobierno porque este destruyó fábricas de droga.
“Lo que está haciendo el señor Evo Morales es decir que no está de acuerdo con nuestra política en materia de lucha contra el narcotráfico y, evidentemente, nunca va a perdonar que hayamos destruido más de 3.500 fábricas de pasta base de cocaína durante todo este tiempo”, fueron las palabras de la autoridad, según Erbol.
“BUSCA MUERTOS” El Ejecutivo que rodea a Arce entiende que Evo “busca muertos” y quiere que se genere una convulsión para ponerle fin al mandato del Presidente. “Esta marcha, estos bloqueos, después, posteriormente huelgas de hambre, son precisamente para bañar de sangre al pueblo boliviano. Él (Morales) está buscando muertos como siempre lo ha hecho. En ese entendido, la población debe conocer los objetivos oscuros que tiene Evo”, acusó el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño.
Fuente: OPINIÓN