El seleccionado boliviano dejó en shock a Chile con este resultado, haciendo un envión increíble, tratando de recuperar el terreno que perdió el año pasado cuando perdió dos cotejos en condición de local y con esta victoria estabiliza su caminata en la tabla, donde tiene nueve unidades.
El elenco del seleccionador, Óscar Villegas, bajó de El Alto hacia Santiago, manteniendo la actitud y el juego equilibrado, ganando este partido y la moral a los chilenos, quienes están en su peor momento futbolístico, sin espíritu de lucha y sin futbolistas que saquen la cara por su selección en el estadio donde hace nueve años se coronó por primera vez como campeón de la Copa América.
Después de 67 partidos, en 31 años, Bolivia se impuso fuera de su territorio, comenzando a edificar este resultado con el tanto de Algarañaz, quien conectó un centro de Roberto Fernández, a los 13 minutos. Este golpe dejó herido a Chile, que no pudo reponerse y jamás encontró su juego.
El empate de los rojos pasará como una amarga anécdota para el arquero Carlos Lampe, quien recibió un pase retrasado, se cayó por una lesión y la pelota quedó servida para Eduardo Vargas, que con arco vacío colocó el 1-1, a los 39´. El guardameta fue reemplazo por Guillermo Viscarra.
La siguiente sorpresa fue el 2-1, anotado por Terceros, a los 46´, con un disparo de zurda, moviéndose con agilidad dentro del área, tras una habilitación de parte de Fernández, quien destrozó a los chilenos por el costado izquierdo.
En la segunda parte la presión siguió siendo para los locales, quienes no encontraban la forma de acomodarse en la cancha. Tampoco había espíritu batallaron, ni figuras que puedan empujar a sus compañeros y fueron fácilmente superados en una vergonzosa actuación de los chilenos.
Bolivia supo mantenerse intacto en la segunda mitad, von Viscarra haciendo una buena labor y jugó con la desesperación de los anfitriones, que salieron rechiflados por su público y quedándose con cinco puntos, sin sumar nada en esta doble fecha.
APG/AB mr