Potosí, 26 de agosto de 2024 (ABI). – Con la participación de más de 20 estudiantes y personas interesadas en la escritura del español antiguo se desarrolló el taller “Paleografía de los Siglos XVII y XVIII”, en la sala Cecilio Guzmán de Rojas de la Casa Nacional de Moneda (CNM), en Potosí.
“La actividad no sólo ha ampliado el conocimiento sobre la escritura antigua, sino que también ha sido crucial para formar a futuros especialistas en paleografía”, destacó el director de a.i. de la Casa Nacional de Moneda, Juan Carlos Baspineyro, citado en una nota de prensa.
Baspineyro subrayó también el importante papel que estas iniciativas juegan en la conservación del legado histórico del país.
Durante el taller, que se desarrolló la semana pasada, los participantes profundizaron en el análisis y lectura de documentos históricos, explorando aspectos fundamentales de las abreviaturas, el abecedario y las diversas formas de escritura utilizadas en los siglos XVII y XVIII.
Las sesiones del taller incluyeron clases teóricas y prácticas, permitiendo a los asistentes familiarizarse con las características específicas de los textos antiguos.
Los ejercicios prácticos fueron esenciales para desarrollar habilidades en la interpretación y comprensión de documentos históricos, descubriendo las variaciones ortográficas y caligráficas propias de la época.
La jefa de la Unidad de Archivo Histórico, Ludmila Zeballos, enfatizó la relevancia del taller para la investigación histórica y la formación de nuevos expertos en el área.
Instó a continuar con el estudio de la paleografía e invitó a los interesados a visitar el Archivo Histórico de Casa Nacional de Moneda, para explorar los Fondos
Documentales resguardados por el repositorio y seguir profundizando en la investigación.
El taller fue impartido por Silvia Flores Murillo, catalogadora del Archivo Histórico y experta en paleografía. Los participantes que superaron una evaluación recibieron certificados.
A través de actividades académicas, como el taller de paleografía, el repositorio busca fortalecer el conocimiento y las habilidades de quienes estudian documentos históricos, contribuyendo significativamente a la preservación de la rica tradición documental del país.
Fuente: ABI