La Academia se fue del certamen batallando hasta el final, pese a los errores que mostró en sus líneas y que no le dieron el pase a la próxima instancia. El único consuelo para los bolivaristas fue que finalizaron como invictos en condición de local en esta edición.
El único gol celeste fue convertido a los 57 minutos con un golpe de cabeza de Bruno Sávio, ingresando al área a espaldas de los contrarios, aprovechando el centro diagonal que salió de Fábio Gomes. Este tanto hizo brotar la ilusión en las tribunas, pero ese entusiasmo se transformó en una sensación agridulce al final del tiempo reglamentario.
Bruno Sávio se puso al frente de los bolivaristas, con actitud peleó los balones y a los 14 minutos envió un centro que Ramiro Vaca conectó sin fuerza ni dirección de frente al pórtico de Agustín Rossi.
Vaca fue el jugador que más probó de larga distancia, en el segundo tiempo exigió a Rossi y en la recta final Henry Vaca se sumó a esta tarea con un zurdazo que el guardameta de los rojinegros desvió y el palo terminó por despejar el peligro.
Pese a la urgencia que tenía, el equipo boliviano siguió mostrando su fragilidad en el terreno en la zona defensiva, donde los minutos finales estuvo amenazado por Luiz Araujo y sus intentos, uno de esos fue desviado por Carlos Lampe, quien de nuevo mostró dudas saliendo de su área.
Un despeje de balón desde el área de los visitantes, sorprendió a Anderson de Jesús, pero no a Araujo, quien ganó en la carrera desde la mitad del campo y cuando estaba por desprenderse fue derribado por el zaguero de la Academia y como castigo recibió la tarjeta roja, a los 89 minutos.
Flamengo se fue con el boleto a los cuartos de final, instancia en la cual se enfrentará a Peñarol, en septiembre, cuando se reanude la Copa Libertadores.
APG/MR