Su tío y su padrastro la violaron y convirtieron su vida en un calvario. El concubino de su mama cayó preso. Su madre no le creyó y entregó una carta al juez en apoyo al hombre, pero un juez lo envió a la cárcel de Palmasola
Desde sus 12 años una niña enfrentó un tormento en su vida. Primero su tío abusó sexualmente de ella, luego de dos años soportó el mismo ultraje de su padrastro. Encontrar justicia se convirtió en un calvario, pero decidió luchar sola en busca de la verdad.
La historia de la víctima ahora está escrita en diligencias que ya elaboró la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), la Fiscalía y la Defensoría de la Niñez y Adolescencia. Es de padres separados, pero ella se quedó a vivir con su mamá. En 2022, según los informes, fue violada por un tío.
El agresor fue detenido, pero salió libre y ese hecho quedó prácticamente en la impunidad.
La niña, viviendo con su madre, conoció a su padrastro, un constructor de viviendas que primero le dio buen trato. La casa era habitada por su madre, su padrastro y sus tres hermanos: una de 11 años, un hombre de 10 y otra niña de tres.
El segundo calvario
El segundo ultraje sexual lo empezó a soportar desde inicios de 2023 pero a manos de su padrastro.
La abogada Raquel Guerrero, que asumió su defensa, aseguró que la víctima al final sacó fuerzas y reveló todo en busca de justicia.
En su colegio su compañero y con quien empezó a enamorar se enteró de los ultrajes. Buscó a su papá y le contó lo que pasaba. El padre peregrinó para denunciar, hasta que a junto a su hija logró ser escuchado.
Las investigaciones se iniciaron y un informe policial fue clave. Sin embargo, con presión del abogado del padrastro, quien con amenazas obligó al agente asignado a retirarse del caso. En entrevista sicológica ante la defensoría, reveló: “mi padrastro ni bien conoció a mi mamá empezó a molestarme, me abrazaba desde atrás y me tocaba…, eso lo hacía cuando mi madre no estaba”. Llorando dijo que su padrastro, la violó por la fuerza hasta en su vehículo, más de 10 veces. Su hermana de 11 años sabía, y junto con ella le contó a su mamá, pero no led creyó. Tras peregrinar, su padrastro fue detenido y la Fiscalía lo imputó por violación agravada.
Una carta manipulada
La Fiscalía presentó al sujeto ante el juez cautelar Rodrigo Buhezo de la radial 17 y medio. La madre de la niña sorprendió al presentar una carta ante el juez. Era un nuevo testimonio atribuido a la víctima que se retractaba e incluso hablaba bien del agresor negando el delito. El juez detectó que la carta estaba escrita con terminología jurídica que no es propia de la niña. Concluyó que era una manipulación y de esa forma no aceptó que el autor salga libre.
La madre, en la audiencia, asumió férrea defensa de su conviviente, autor de la violación y condenó la acusación de su hija que clamaba justicia desde hace tiempo. El juez dictó 180 días de cárcel por considerar que las pruebas eran fehacientes. La niña llorando sintió un alivio, abrazó a su abogada Raquel Guerrero. Ante el juez, reveló las amenazas que recibía de parte del abusador, pero la callaron, y contó que ella decidió luchar sola.
Fuente: EL DEBER
