La presidenta del Tribunal Departamental de Justicia de Potosí, Yacira Cardozo, ha sacudido el ámbito judicial al revelar una presunta interferencia política superior en su cargo.
Según Cardozo, el magistrado Edwin Aguayo, el decano Remberto Mamani y el vocal Remberto López la están presionando para que renuncie, incluso indicando que la orden proviene del ministro Iván Lima.
En respuesta, Cardozo ha anunciado su intención de presentar una denuncia penal contra estas personas, acusándolas de tráfico de influencias, acoso laboral y violación de la libertad laboral.
Ayer, en una aparente movida orquestada por Aguayo, el decano del tribunal, en violación de la normativa vigente, según Cardozo, convocó a Sala Plena para llevar a cabo su renuncia y el cambio de presidente en el Órgano Judicial.
La presión política contra Cardozo parece estar relacionada con su decisión de revocar resoluciones de jueces en el caso del alcalde Jhonny Llally.
Cardozo ha desafiado al ministro de Justicia, Iván Lima, instándolo a sumarse a la denuncia penal que presentará en las próximas horas contra sus colegas y el magistrado Aguayo, para esclarecer si él está involucrado en esta situación política.
Este relato evidencia la gravedad de la situación y plantea serias interrogantes sobre la independencia del poder judicial en Potosí y la posible influencia política en su funcionamiento.