El Jueves de Comadres en la ciudad de Tarija ha comenzado con una atmósfera cargada de tradición, amistad y alegría, en medio del sonar del erque y la caja, a pesar de un inicio lluvioso.
Como dice la copla, “aguacero pasajero, no me mojes el sombrero”, la lluvia que marcó el inicio de la jornada ha dado paso a la celebración, y las mujeres tarijeñas ya se están congregando en la plaza Luis de Fuentes y Vargas para dar inicio a esta festividad única.
Acompañadas del sonar del erque y la caja, varios grupos de mujeres pertenecientes a diferentes comparsas y grupos, luciendo mantas y blusas típicas bordadas, sombreros chapacos, polleras y ojotas charoleadas participan de la pre-entrada por el centro de la capital tarijeña.
Entre tanto, otro gran número de mujeres empiezan a estrechar lazos de amistad con hombres y mujeres con la tradicional entrega de las canastas de comadres.
La ciudad de Tarija se impregna con los aromas característicos de la ocasión, el dulce aroma de la albahaca y la fragancia de la rosa pascua, creando un ambiente festivo y acogedor que invita a todos a sumarse a la celebración.
Este Jueves de Comadres no solo es una oportunidad para celebrar la amistad y la tradición, sino también para resaltar la importancia de preservar y promover la cultura y las costumbres locales que hacen de Tarija un lugar único en Bolivia.
Fuente: ELPAÍS.BO