* Tiene dos productos patentados que permiten mayor tratamiento de minerales y menor consumo de agua y electricidad
Potosí, Kollasuyo Digital
Pioneros. Bolivia y Potosí son los primeros en utilizar la Inteligencia Artificial (AI, por sus siglas en inglés) para optimizar la producción minera, aumentando el tonelaje de mineral concentrado y reduciendo el consumo de agua y electricidad.
En un planeta dependiente de las computadoras y los sistemas informáticos, además de la irrupción creciente de la AI, un país del tercer mundo y una de sus regiones más pobres logró inventar dos métodos para optimizar la producción de concentrados de minerales.
El país es Bolivia y la región es Potosí, concretamente la comunidad de San Cristóbal – ubicada en la provincia Nor Lípez y el municipio de Colcha K –, donde funciona la Minera San Cristóbal (MSC).
Los inventos fueron logrados por equipos multidisciplinarios integrados por bolivianos y potosinos después de 3 a 4 años de trabajo, comenzó su explicación el gerente de Planta de la MSC, Wilber Churata.
MOLINOS CON MICRÓFONOS
El primer desafío fue incrementar la producción; pero había un gran obstáculo, el alto consumo de electricidad y los problemas referidos a la dureza de las cargas de minerales – algunas son muy duras y otras blandas – provenientes de la cantera.
Entonces se hizo una serie de experimentos hasta que se logró incorporar a la molienda el sonido que emiten las cargas.
Ahora se utilizan micrófonos – se denomina sistema de molienda por sonido – en los molinos para controlar cada segundo, mediante un código informático, el trabajo a realizarse. Para ello se cuenta con un sistema de control totalmente informatizado y a cargo de personal femenino potosino, previamente capacitado.
Este método permitió incrementar la producción en un 80 por ciento en el tratamiento de los minerales y bajar, al mismo tiempo, el consumo de electricidad en un 30% desde su implementación el año 2008.
EXPRIMIDOR DE COLAS
El sudoeste potosino no atrae lluvias torrenciales y es una zona árida que cuenta con depósitos de agua subterránea que debe aprovecharse óptimamente.
La actividad minera requiere de gran cantidad de agua para las plantas concentradoras de minerales y, en ese sentido, el equipo multidisciplinario de la MSC creó un espesador de colas que con la ayuda de dos equipos Mad Master – cuyo costo es de unos 600 mil dólares, cada uno –, permite reciclar un 80 por ciento del agua utilizada en las plantas concentradoras.
Desde la Zone Control o Zona de Control, mediante la AI, a través de un código informático, se controla cada segundo del funcionamiento de este espesador para introducir los equipos anfibios que exprimen las colas para tener más agua reciclable.
Este sistema se extiende al depósito de colas, ubicado a más de cinco kilómetros de la planta, para llevar adelante otro reciclaje de agua con la finalidad de recudir el uso del elemento líquido fresco.
Pronto llegará otro Mad Master; mientras tanto, los experimentos en los laboratorios de la MSC continúan para optimizar el trabajo de la mano de la tecnología.
Estos métodos pronto serán utilizados en las Mineras más grandes de Perú y Chile, señala el potosino Churata, mirando a sus paisanas, quienes operan la Zona de Control…
Willy Alcocer Salas
