El Ministerio Público, en audiencia de procedimiento abreviado, demostró hoy con pruebas contundentes que William Rodrigo Clemente Palma, de 22 años, es autor del delito de Infanticidio cometido en contra de su hijo de tres años, quien murió víctima de múltiples golpes en su cuerpo, por lo que el Tribunal 3ª de Sentencia de la ciudad de El Alto, resolvió 30 años de prisión, sin derecho a indulto, que el sujeto debe cumplir en el penal de San Pedro.
“Durante la audiencia de juicio oral en la etapa de producción de prueba de cargo, la Fiscalía presentó las pruebas que demuestran la autoría del sujeto como el acta de autopsia médico legal, el acta de colección de indicios materiales, biológicos y genéticos que permitió el dictamen pericial que demostró que el sujeto agredió sexualmente al niño y le produjo la muerte, entre otras, ante la carga probatoria en su contra el acusado decidió someterse al procedimiento abreviado y admitió la autoría”, dijo el Fiscal Departamental de La Paz, William Alave Laura.
De acuerdo al acta de autopsia médico legal, realizado por el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), el niño murió por traumatismo abdominal, también se evidenció signos de violencia en el rostro y otras partes del cuerpo. Luego del informe pericial de las muestras colectadas se determinó que hubo agresión sexual a la víctima.
La Fiscal de Delitos Contra la Vida, Martha López, informó que el hecho sucedió el 08 de noviembre de 2021, cerca de las 19:00 horas, cuando el sujeto se quedó al cuidado de su hijo de tres años, mientras la madre salió de su domicilio de la ciudad de El Alto, circunstancia que aprovechó para agredir sexualmente al menor y lo golpeó.
Posteriormente llegó la madre y ante la versión que hubiera muerto por una diarrea, la pareja organizó el velorio del niño.
Ante la situación, la tía materna del menor, dudó de la versión del sujeto y denunció el hecho a las autoridades y cuando el Ministerio Público y la Policía llegaron al lugar verificaron signos de violencia en el niño y aprehendieron al padre por ser sospechoso de la muerte de su hijo y la madre por encubrimiento, porque no denunció el hecho y por el contrario organizó el velorio de la víctima junto al autor.
Fuente: FGE