* Su influencia pasó los límites de la explotación minera
Potosí, Kollasuyo Digital
“Todo en su justa medida” es la frase que – creemos – mejor se acomoda a una serie de reportajes sobre la Minera San Cristóbal (MSC) a publicarse en el transcurso de esta semana, tras la visita al mayor emprendimiento minero del país que está en pleno desarrollo.
Hasta llegar a la tranca e ingresar a la recepción del campamento parece una empresa más; pero una vez registrados y recibir la tarjeta de ingreso comienza a sentirse el cambio – no sólo tecnológico o de hábitos y filosofía de trabajo – en ese lugar situado en la provincia Nor Lípez, municipio de Colcha K, comunidad de San Cristóbal y a unos 3.900 metros sobre el nivel del mar, para más detalles.
Este emprendimiento ya invirtió más de 1.800 millones de dólares desde su inicio en el año 2007; pero su influencia va más allá de la explotación minera, complejos de plomo plata y zinc plata.
Sus objetivos de respeto al medioambiente, seguridad personal e industrial y compromiso social son sus pilares, de acuerdo a su gerente medioambiental, Mario Velasco.
Cada día mueven unas 150.000 toneladas (Tn) de carga en el yacimiento a cielo abierto más grande del país y uno de los mayores de esta parte del continente; pero sólo son procesadas 50.000 a 52.000 Tn para obtener 1.500 a 1.600 Tn que vía el puerto de Mejillones (Chile) son exportadas a otros países.
El uso de la tecnología marca la diferencia en las operaciones de la minera en todas las áreas.
También es fundamental el respeto y la seguridad medioambiental para evitar la contaminación; pero, al mismo tiempo, optimizar los resultados en la labor diaria.
La seguridad industrial para evitar accidentes es otro de los pilares de esta empresa porque se valora a las personas.
El compromiso con la población – especialmente de San Cristóbal y Kulpina K – es fundamental en las áreas de educación (becas), salud (atención gratuita) y los emprendimientos productivos en el servicio gastronómico, tejidos de fibra de lana y costura y el procesamiento de la carne de llama.
Las mujeres no tienen un espacio preferencial, sino justo porque los cargos que ocupan en áreas claves de las operaciones de la empresa se debe a su capacidad de superación y decisión – manejan equipos pesado y operan la planta concentradora – afirman en la MSC.
Y es que sus pilares no están separados, sino, más bien, se complementan bajo una filosofía de trabajo: buscar la excelencia empresarial e institucional.
Hasta ahí un esbozo de esta empresa de clase mundial en un país que tiene un largo camino por recorrer para alcanzar su desarrollo…
Willy Alcocer Salas