Los municipios de Pasorapa, Omereque, Aiquile y Vacas son los más afectados por la falta de agua en la región del Cono Sur de Cochabamba.
El director ejecutivo de la Mancomunidad de Municipios de la Región del Cono Sur, Guery García, explicó que, desde hace dos meses, la región experimentó una insuficiente recarga hídrica en sus represas y caudales, lo que lleva a que algunas zonas se encuentren al borde de la emergencia.
“Podemos estar unas dos semanas más y ya van a empezar el tema de las emergencias y también las declaratorias de los municipios”.
Los municipios de Pasorapa, Omereque, Aiquile y Vacas son los más afectados hasta el momento; existen disminuciones significativas en sus caudales hídricos.
Para hacer frente a esta crisis, la Mancomunidad impulsó la perforación de pozos.
“Tenemos la perforación de pozos que son dos por municipio que está realizando en los prioritarios que son Pasorapa, Omereque y Aiquile y también el municipio de Arani, donde ya han concluido. Los otros seis municipios están en etapa de estudios”, explicó.
El municipio de Vacas, en particular, se encuentra en una situación crítica, y el suministro de agua se prioriza para el consumo humano y el ganado. solicitaron colaboración al Gobierno central para acelerar las acciones necesarias. Se espera que, en aproximadamente una o dos semanas, se entreguen dos pozos perforados en Vacas para aliviar la situación.
La escasez de agua ha llevado a la reducción en el suministro del líquido potable.
“En algunos municipios, antes, se entregaba tres veces a la semana el agua potable para que puedan consumir. Ahora, se ha llegado a una vez a la semana. Se está tratando de economizar; pero, no nos da tregua”, dijo García.
La falta de agua también impacta en la producción agrícola de la región. Los cultivos, especialmente las hortalizas y los tubérculos, disminuyen en su potencial debido a la falta de riego continuo.
“Se está viendo que la producción no está con la misma potencialidad que salía antes”.
Los representantes de la Mancomunidad abogan por soluciones también a largo plazo.
Fuente: OPINIÓN