VIVENCIAS DE UN CAMARÓGRAFO
Era el mediodía del 10 de mayo del 2023. El sol irradiaba con fuerza, había terminado el acto de homenaje al aniversario de la prensa que se realizó en casa de la moneda de la ciudad de Potosí, yo terminé de filmar el acto y corrí a la oficina de comunicación de la Gobernación donde trabajo, luego de dejar la cámara marque la asistencia y salí de mi fuente de trabajo, caminé unos pasos justo en la esquina de COTAP, calle Quijarro de la ciudad de Potosí, me encontré con mi amigo Luisin, quien estaba saliendo del acto de la Casa de la Moneda. Nos pusimos a hablar del aniversario de la prensa, él muy amablemente me pidió que esa noche, le fuera filmar el acto de la asociación de la prensa, pues sería condecorado por la cámara de diputados junto a otros periodistas, empezamos a caminar juntos y empezó una conversación que recuerdo como si hubiese sido ayer. Porque quedó marcada en mi alma.
Mientras el sol irradiaba y la gente caminaba normalmente, Luisin inquirió -tenemos que grabar el programa de homenaje que dijimos, ya están listas mis fotitos y mis mejores chistes del Criticón de tantos años, ya encontré mi material-.
-Este fin de semana Celsito filmaremos en mi casa además te invitaré un wisquisito, si discúlpame porque te fallé muchas veces, creo que ya teníamos que filmar tiempo atrás-. Yo le miré y le dije, -ojalá esta vez cumplas-. Él replicó -no hermano esta vez no te fallaré, por eso tienes que ir a filmar esta noche, eso también servirá para el reportaje-. Yo lo quise ver de frente y me di cuenta que el mantenía la cabeza baja, un poco agachado y no me miraba al hablar. Él empezó a decir -tenemos que hacer este reportaje si no mis nietos no van a saber quién era el criticón-.
-Ahí está, varios de nuestros amigos se murieron, eran importantes en su tiempo y ahora nadie se acuerda, yo no quiero eso, tienes que hacer un lindo reportaje para que sepan quién le hace reír al culminar las noticias en Radio Kollasuyo al mediodía-.
Yo quedé asombrado por las ganas que tenía de filmar el reportaje del criticón, porque muchas veces ya me había fallado, mientras ese medio día lleno de bullicio y sol que parecía normal yo lo sentí un poco raro a mi amigo criticón. Él exhaló e inquirió diciendo -son muchas cosas de la que fui testigo en esta ciudad y no puedo irme así nomás-.
-Qué te pasa- le dije, -tú tienes que hacer todavía muchas cosas-, él replicó, -sí-. Pero su mirada y su vista siempre miraban para abajo.
Conversamos un poco más y dijo, -yo pensé mal de ti, pensé que tú habías pasado una información a una ex autoridad, por eso te trataba mal, pero me enteré más después que no fuiste tú. Y por eso te pido disculpas, tú eres un gran amigo- y me alcanzó su mano para despedirnos, yo dije en mis adentros -qué raro, qué le estará pasando al criticón- y me fui a mi casa.
Esa noche yo fui a filmar el acto de la Asociación de la Prensa que se realizó en casa de la Moneda, donde fueron galardonados varios compañeros de la prensa por la cámara de diputados. Esa noche filmé el último discurso en público de mi amigo. Luis Velásquez Pareja, donde contó un poco de su vida, esa noche como todos, me acerqué a abrazarles a mis compañeros homenajeados, le di un abrazo a Luisin y dijo -sabía que no fallarías- y me agradeció, -dijo no te hagas compromiso este fin de semana filmaremos el reportaje- yo asentí, nos abrazamos y nos despedimos.
A los pocos días por medio de los compañeros de prensa me entere que él había sufrido un accidente y se encontraba muy mal y seria intervenido quirúrgicamente.
Mi conciencia empezó a golpearme a aguijonearme, porque no había insistido para hacer homenaje a este periodista que nació con chispa innata para hacer reír a la gente, para convertir cualquier hecho en un chiste, que cientos, no, miles de personas esperaban el espacio. Esto no es noticia, pero es verdad del criticón, para reír al culminar las noticias en radio Kollasuyo.
Hace poco pude visitarle y ver en carne propia. La lucha desigual que el mantiene con la parca, lucha por permanecer en esta vida. Yo me siento en deuda por que no pude cumplir ese reportaje de homenaje a uno de mis amigos, que le dio mucho a esta tierra que lo vio nacer. Y que seguramente muchos Potosinos rieron con su espacio de chistes en: esto no es noticia, pero es verdad, su revista el Criticoncito y escuchar su programa Radio Visión 93 en radio Kollasuyo.
Esa tarde que te visité en tu casa, te solicité con lágrimas salidas de mi alma, disculpas por no haber podido hacer reportaje al criticón, pero también te pedí permiso para publicar esta historia de vida que me inspiraste a escribir.
Estimado amigo, aunque incompleto he tratado de hacer homenaje sincero al Criticón, un periodista, que ya en su corta ausencia hace sentir la falta de su presencia.
En cada jornada de trabajo, todos los compañeros de la prensa sentimos tu ausencia y pensamos que muy pronto te acercaras y saludaras como lo hacías antes, todavía la lucha no está perdida. Esa es nuestra esperanza.
Desde el fondo de mi corazón y de todos los compañeros de la prensa de Potosí, rogamos y pedimos al omnipotente que nos dé la oportunidad de volverte a ver pronto.
Luisin, tus amigos te esperamos. Gracias por todo.
CELSO DURAN SANCHEZ