Crónica de un divorcio anunciado
El divorcio entre el grupo Wagner y el Ejército ruso se había firmado días antes, cuando su jefe se había negado a incluir a sus hombres dentro del esquema militar del Ministerio de Defensa. Las críticas de Prigozhin han sido importantes desde que empezó el conflicto en febrero del año pasado y su grupo de voluntarios entró en escena en la región de Donbás después de una trayectoria internacional. La falta de munición y apoyo logístico fueron denunciados con vehemencia por el amigo de Putin, único en Rusia con el derecho a criticar sin represalias. Al menos hasta ahora.
El supuesto ataque de este viernes fue negado de manera inmediata por el Ministerio de Defensa y el portavoz oficial del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró que «el presidente Putin había sido informado de todos los acontecimientos en torno a Prigozhin» y «se estaban tomando las medidas necesarias».
Poco antes de esta respuesta oficial del Kremlin, Prigozhin había desvelado que va a poner orden en la situación que atraviesa el país afirmando que sus 25.000 hombres «van a buscar una respuesta al caos en el país», pero que sus acciones «no son un golpe de Estado». «Esto es una marcha por justicia» y que, mientras esto ocurra, «las operaciones militares no van a verse afectadas».
En un país totalmente controlado por su Gobierno como Rusia, las palabras de Prigozhin pueden ser entendidas como una invitación a la rebelión civil, algo radicalmente opuesto a los esfuerzos del Kremlin, que desde que empezara la guerra ha intentado por todos los medios que las protestas de la población no se conviertan en un posible conato de levantamiento.
En un comunicado publicado, ya por la noche, los servicios rusos de seguridad informaban de que «las declaraciones difundidas en nombre de Yevgueni Prigozhin no tienen fundamento. En relación con estas declaraciones, el Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB) de Rusia ha iniciado un caso penal por llamamiento a la rebelión armada. Exigimos el cese inmediato de actividades ilegales».
El FSB hace un llamamiento a los mercenarios del grupo Wagner a “no cometer un error irreparable” y no cumplir las órdenes de Prigozhin. “Llamamos a los combatientes del Ejército privado a no cometer un error irreparable, cesar cualquier acción armada en contra del pueblo ruso, no cumplir las órdenes criminales y traidoras de Prigozhin, tomar medidas para su detención”, afirmó el FSB en un comentario citado por Interfax.
Las acusaciones sobre el jefe de este grupo paramilitar son graves y podrían apartarle de inmediato de sus actividades. El artículo 279 del Código Penal refleja que el «llamamiento a la rebelión armada» es un delito «especialmente grave», que conlleva una pena de cárcel de entre 12 y 20 años. Queda en el aire si las amenazas de este millonario amigo de Putin serán puestas en marcha y qué consecuencias inmediatas podrían tener en la sociedad rusa.
Wagner cruza la frontera rusa
Prigozhin anunció este sábado que su grupo de mercenarios había cruzado ya la frontera rusa y “están entrando” en la ciudad de Rostov, al sur del país. “Ahora estamos entrando en Rostov. Las divisiones del Ministerio de Defensa, o mejor dicho, los reclutas, que fueron arrojados para bloquear nuestro camino, se hicieron a un lado” indicó el líder de Wagner en un audio en su cuenta de Telegram recogido por el portal de noticias Meduza.
El ex “cocinero de Putin” añadió que “no matan niños”: “Los niños son asesinados por (el ministro de Defensa Sergei) Shoigu, lanzando a la guerra a soldados sin entrenamiento, incluidos reclutas. Luchamos solo con profesionales. Si alguien se interpone en nuestro camino, lo destruiremos. Extendemos la mano a todos, no nos escupan la mano. Seguimos adelante e iremos hasta el final”, zanjó Prigozhin.
El jefe de Wagner respondió también a los llamamiento del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, antiguo KGB) a arrestarlo, al señalar que cuenta con “hermandad, justicia, honor, vergüenza”. “Ustedes no tienen estos sentimientos, y por eso no pueden comprender más que la traición”, concluyó.
Por otro lado, el general de las Fuerzas Armadas rusas, Sergei Surovikin, ha hecho un llamamiento a los paramilitares de Wagner para queno hagan caso de las provocaciones de Prigozhin, quien estaría alentando una suerte de golpe militar. “Las acusaciones difundidas en nombre de Prigozhin no tienen fundamento. En relación con estas declaraciones, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia ha abierto un caso penal por el hecho de llamar a una rebelión armada”, explicó el Comité Nacional Antiterrorista, según ha recogido la agencia de noticias TASS.
Helicóptero derribado
El jefe de Wagner informó esta madrugada de que sus fuerzas derribaron un helicóptero del Ejército ruso.“Ahora mismo un helicóptero abrió fuego contra una columna de civiles, fue derribado por los efectivos de Wagner”, indicó en un audio publicado en su canal de Telegram.
Poco antes, Prigozhin denunció que dos aeronaves de la Fuerza Aérea rusa, con los identificativos 523 y 546, “intentaban atacar” a la columna que presuntamente ingresó en la región rusa de Rostov, en el sur del país, y avanza hacia Moscú. “Recuerden, muchachos, la patria no les perdonará que disparen contra su territorio. Hay que mostrar valentía y disparar contra el territorio enemigo cuando avanza nuestra infantería”, alertó.
El gobernador de Rostov, Vasili Golubev, señaló por su parte en su canal de Telegram que “la situación demanda la concentración máxima de todas las fuerzas para mantener el orden”. “La policía toma todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de la población de la región. Pido a todos mantener la calma y no salir de sus casas sin necesidad”, indicó.
Moscú blindada
Agentes del orden bloquearon la carretera que sale de Rostov, donde han sido vistos vehículos blindados, según el canal Astra. VKontakte, el Facebook ruso, bloqueó la página de Prigozhin, donde habían sido publicados los audios en los que se declaraba en rebeldía con el Ministerio de Defensa ruso.
Vídeos que circulan en las redes sociales muestran unamplio despliegue de vehículos blindados militares y de la guardia nacional en Moscúy en la ciudad sureña de Rostov, cerca de la línea del frente en Ucrania, donde los combatientes de Prigozhin habían sido desplegados.
La agencia estatal de noticias Tass informó que las autoridades han fortalecido las medidas de seguridad en las principales instalaciones gubernamentales y de transporte del país tras la amenaza del jefe de Wagner.
Del mismo modo, la región sureña de Lipetsk, 420 kilómetros al sur de la capital rusa, anunció medidas de seguridad reforzadas por la cercanía de los mercenarios de Wagner.
Fuente: LA RAZÓN ESPAÑA