Ayer, se encontró el cuerpo sin vida de Persifal de Monsalvat en medio de arbustos y matorrales en Quenamari, Cochabamba. La Policía cuenta con información sobre los posibles autores.
El pasado 3 de junio, Parsifal de Monsalvat Santa Cruz (de 50 años) salió a las 05:15 de su domicilio ubicado en la zona sur de Cochabamba. Fue contratado, junto a otros, para vigilar una zona conflictiva debido a disputas por terrenos. Nunca regresó a su hogar. Lo que nadie esperaba es que esa sería la última vez que lo verían con vida. Después de tres días de búsqueda, encontraron su cuerpo sin vida en medio de arbustos y piedras en el sector de Quenamari.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de Cochabamba, Freddy Medinacelli, informó que el cadáver de la víctima fue descubierto la mañana de este 6 de junio durante el segundo esfuerzo de búsqueda. En el rastrillaje participaron policías de la Central, de Quillacollo y de la zona sur, así como también bomberos.
Según el jefe policial, la familia de Persifal reportó su desaparición el 4 de junio en dependencias policiales de Colcapirhua. El hombre había salido de su casa informando que se dirigía a cumplir un contrato en la zona de la Pradera. El 5 de junio, los familiares contactaron a dirigentes para solicitar permiso de ingreso y llevar a cabo una búsqueda exhaustiva. Los funcionarios policiales de Colcapirhua y de la zona sur acordaron llevar a cabo un operativo conjunto, ingresando desde dos sectores diferentes para ampliar el área de búsqueda. Sin embargo, el primer intento realizado por los uniformados no tuvo resultados positivos.
Según las investigaciones, el 4 de junio por la tarde, un grupo de personas armadas con palos y piedras merodearon la zona. Testigos relataron que Persifal fue atacado con pedradas y golpes. Aunque los agentes de la policía se dirigieron al lugar donde fue visto por última vez, finalmente su cuerpo fue encontrado en otro sector. Se presume que fue victimado en un área y luego abandonado en otra. El cadáver muestra evidentes signos de violencia, presentando múltiples contusiones. Este martes se llevó a cabo la autopsia forense para determinar con precisión las causas de la muerte.
Medinacelli afirmó que ya se cuenta con información sobre las posibles personas que lideraron el grupo agresor.
En un caso previamente reportado, un hombre presentó una denuncia durante el fin de semana, alegando que un grupo de entre 20 y 25 personas ingresó a su vivienda ubicada en Quenamari Kullku (Colcapirhua) el 3 de junio con la intención de desalojarlo. Durante el incidente, arrojaron artefactos explosivos que provocaron un incendio. El personal policial secuestró material explosivo.
Fuente: OPINION.BO
