El joven, que desapareció el martes durante una excursión a las cascadas de Apote, en Tiquipaya, fue socorrido hoy jueves por un grupo de rescatistas. Su madre tiene dudas respecto al caso.
Fue, a todas luces, un milagro el hecho de hallarlo con vida. Jhosfer Toledo, de 25 años, sobrevivió 48 horas en la intemperie, sin su suéter, sin comida y con sus prendas mojadas.
Su desaparición, reportada el martes, cuando el joven acudió a las cascadas gemelas de Apote, en Tiquipaya, junto a un grupo de amigos, terminó con un óptimo final. Sus padres fueron no solo testigos del hallazgo de Jhosfer, sino que han sido parte activa de las labores, comandadas por los rescatistas que se entregaron al 100%.
Hoy jueves, luego de dos días de angustia, sensación principalmente experimentada por sus progenitores, el joven fue auxiliado.
No resultó nada sencillo llegar hasta él. De acuerdo con el relato brindado por su papá, Jhosfer se encontraba en una quebrada, al fondo. Estaba mojado, sin fuerzas, como consecuencia de la deshidratación.
El personal de rescate del SAR – Bolivia y voluntarios dieron con él, en medio de una travesía complicada que contó, incluso, con la utilización de una camilla.
SU MAMÁ, CONMOVIDA
La madre del joven, lógicamente sensibilizada ante el hecho de saber que su hijo estaba a salvo, expuso su sorpresa al conocer que Jhosfer carecía de abrigo.
“Sobrevivió dos noches estando desabrigado porque su chompita estaba en su mochila. Solo ha debido estar con polerita, me imagino. Gracias a Dios y a todas las personas que hicieron cadena de oraciones por mi hijo”, dijo la mujer, en nota con Red Uno.
Su padre, quien fue uno de los que dio con el muchacho en la quebrada para luego dar aviso a los socorristas, narró parte de la situación. “Estaba botado en un riachuelo, echado en el agua. Estaba prácticamente mojado, sangrando. Hemos tenido que ponerle nuestra ropa para calentar su cuerpo. Le hemos tenido que friccionar. Le dimos agua. Solo abría sus ojos”.
“Solo me agarraba de mi brazo, no quería que me apartara de él. Le dije que íbamos a salir de esta, como salimos de tantas”, agregó el progenitor, consultado por Red Uno.
INCÓGNITAS
Para la mamá de Jhosfer, hay elementos extraños en el caso. Un aspecto que le llamó la atención es el hecho de que el celular de Jhosfer haya estado con su mochila, lejos del joven.
“Voy a llegar hasta el fondo de esto. Tengo que saber lo que realmente pasó. Debía haber tenido su celular en la mano. El celular estaba junto con la mochila. Eso no me cuadra”.
Fuente: OPINIÓN
