Los familiares de los dos cadetes de cuarto año piden justicia. La Defensoría del Pueblo solicitó informes al Colegio Militar. El Ministerio de Defensa instruyó una “rigurosa investigación” interna. El Ejército correrá con los gastos hospitalarios
El Ministerio Público inició las investigaciones para establecer las causas e identificar a los responsables de la tragedia en el Colegio Militar del Ejército, donde dos cadetes sufrieron graves lesiones en una demostración de descenso de 20 metros. El Ministerio de Defensa también instruyó al comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas organizar una pesquisa interna. Mientras, los expertos observaron “negligencia” en la ejecución del salto y el testigo Omar Durán denunció que hubo “omisión” de parte de los jefes militares que presenciaron el accidente.
“Se ha procedido a realizar el registro del lugar del hecho, la respectiva toma de las placas fotográfica y la colección de algunos indicios materiales que puedan servir para llegar a la verdad histórica de los hechos”, informó la fiscal Viviana Quispe desde la institución militar, ubicada en la zona Sur de la sede de Gobierno.
Las autoridades colectaron las cuerdas usadas por los cadetes para el denominado “salto de la muerte”, la indumentaria de seguridad y una cámara inserta en uno de los cascos de los heridos que grabó audio y video. La Fiscalía investiga, de forma provisional, el delito de lesiones culposas.
El martes, el Gobierno junto al mando militar celebraron el Aniversario 132 del Colegio Militar del Ejército “Cnl. Gualberto Villarroel”. Los actos incluyeron desfiles y demostraciones de “eficiencia combativa” de los estudiantes. Al iniciar el acto, el presidente Luis Arce emitió su discurso junto a otras autoridades con las que presenció la marcha militar para luego retirarse.
Según el abogado Omar Durán, testigo y oficial retirado, señaló que el accidente de los dos cadetes ocurrió cerca del mediodía, momento en el que el jefe de Estado ya no se encontraba en la institución militar. Agregó que hubo negligencia en la preparación de las cuerdas y en la posición de las colchonetas porque estaban “fuera del ángulo de caída”.
Asimismo, cuestionó que el Ministerio de Defensa haya instruido una investigación a jefes militares que tendrían que constituirse en testigos y hasta posibles “autores por omisión”, ya que ante la fallida demostración del primer cadete no gritaron “alto” para evitar que el segundo estudiante se lance de la plataforma. Según los videos en redes sociales, los cadetes saltan casi en simultáneo con un segundo de diferencia.
“Este es un delito ordinario. En las Fuerzas Armadas tiene que abrirse un proceso administrativo que tiene que durar 10 días. Pero yo he visto personalmente al comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general Hugo Arandia, y he visto al comandante del Ejército, general Juan José Zúñiga, sentados y no hicieron nada, ninguno de los dos. Ellos cayeron en el delito de omisión de socorro que está penado en el Código Penal. Deben investigarlos, ser imputados y juzgados. Hay fotografías y las suficientes pruebas”, insistió.
Remarcó que no solo se debe sancionar al instructor, al comandante del Colegio Militar sino a los altos mandos que estaban en el lugar. Las imágenes del hecho muestran cómo los paramédicos se movilizan y piden una ambulancia para llevar a los heridos.
El Ministerio de Defensa, mediante un comunicado, instruyó al Comando de las Fuerzas Armadas realizar una “rigurosa investigación” para sancionar a los posibles responsables del grave accidente de los cadetes de cuarto año Erlan C. C. y Cristhian A. L. V. que ahora están internados en la Clínica del Sur. A través de un comunicado, el alto mando militar dispuso “transparencia y rigurosidad” en las pesquisas del grave hecho.
Como parte de la fase preliminar de las investigaciones, se convocó a instructores y compañeros de los cadetes heridos para que presten sus declaraciones. Aún no se identificó a los responsables, pero hay dos investigados.
“No podemos generar un juicio de valor anticipado. Sin embargo, está abierto el caso contra dos autores. Hasta el momento hay cinco cadetes que declararon”, informó el Comandante General de la Policía, Álvaro Álvarez.
Algunos miembros de la Comisión de Gobierno, Defensa y FFAA anunciaron que solicitarán informes e impulsarán investigaciones sobre lo ocurrido el martes.
Desde la Defensoría del Pueblo, a través del Servicio de Prevención a la Tortura, se anunció verificaciones de los centros de formación de militares y policiales, para conocer la situación de los estudiantes. “No podemos arriesgar la vida de un ser humano”, manifestó el defensor Pedro Callisaya. Agregó que en un cuartel se evidenció que los conscriptos no tienen servicio de agua potable.
Sobre el caso ocurrido en La Paz, se solicitó informes al Colegio Militar y hará seguimiento a la investigación de oficio que ordenó el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo. “Estamos haciendo seguimiento a este caso, ya se pidió informe al Ministerio de Defensa, a la clínica y al Colegio Militar. Queremos transparentar la información sobre estos casos, hay familiares que están preocupados por la salud de estos jóvenes”, indicó Callisaya en rueda de prensa.
Estado de salud
La salud de los dos cadetes accidentados aún es crítica y ambos continuarán en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) de la Clínica del Sur. Raúl Beltrán, neurocirujano a cargo de los heridos, explicó que Cristhian L. V. tiene una lesión en la médula espinal con inamovilidad en las dos piernas, aunque la junta médica espera su mejoría.
El otro cadete Erlan C. C. “lamentablemente esta mañana (ayer) empezó a deteriorarse, hemos encontrado otro coágulo en la cabeza. Se tuvo que realizar otra operación. Su situación es más delicada, ya que tuvo golpes en la cabeza. Esta persona tiene que estar sedada y conectada a una máquina. Su situación es más crítica y tenemos que evaluar en las próximas 72 horas”, explicó Beltrán a los medios.
Uno de los familiares informó que el cadete con fractura en la columna también tuvo una perforación en el pulmón, la cual fue drenada de inmediato.
La dirección de la Corporación del Seguro Social Militar (Cossmil) de La Paz confirmó que los dos cadetes no tienen seguro. “El personal militar -desde el momento que egresa de subteniente- tiene un seguro Cossmil. No solo es seguro de salud sino que tiene otros alcances”, anunciaron.
Luego de que los parientes de los cadetes aseguraron, la mañana de ayer, que no reciben ayuda económica del Colegio Militar; el coronel Edmundo Soria, director general de Comunicación del Ejército, informó por la noche que “el Ejército no escatimará esfuerzo en los gastos médicos para lograr la pronta recuperación de los caballeros cadetes, quienes forman parte importante de la familia militar”.
Algunos familiares entrevistados por los medios prefirieron no hacer comentarios sobre el accidente y solo pidieron que se haga justicia. “Ambos cadetes son hijos de familia, los hemos enviado con mucho amor. Confiamos en el Señor que ellos van a recuperarse. Son jóvenes. Tienen entre 20 y 21 años. No queremos adelantar nada”, señaló otra pariente.
Normas de seguridad
Jorge Santistevan, abogado y coronel en servicio pasivo del Ejército, que trabajó durante varios años como instructor de las fuerzas especiales en la Escuela de Cóndores de Sanandita, considera que hubo negligencia en la demostración del ‘salto de la muerte’ realizado por dos estudiantes. Observó que no hay transparencia en la investigación y cree que se debería relevar del cargo al comandante del Ejército.
“El ‘vuelo del ángel’ o el ‘salto de la muerte’ no es una actividad regular, es solo y únicamente para especialistas. La impericia y la negligencia vienen por parte de los instructores, como también de los que han realizado la actividad porque se nota claramente que no tenían conocimiento”, cuestionó Santistevan.
Además de que este salto no puede ser realizado por cadetes, el militar jubilado explicó que se cometieron otras fallas. Entre ellas, mencionó que no había colchonetas adecuadas ni supervisión de los instructores en la parte alta de la estructura como en la parte baja para evitar accidentes.
Sobre las cuerdas, dijo que hay dos tipos: la cuerda de calidad estática que no tiene ningún grado de elasticidad y la cuerda dinámica que tiene entre medio y metro y medio de elasticidad -que se puede usar siempre y cuando el especialista active el freno de la cuerda- al menos tres o cuatro metros antes de tocar tierra. Y añadió que se deben investigar la calidad de los mosquetones o eslabones.
Fuente: EL DEBER