Después de tres horas de reiniciada la sesión, leídas las modificaciones y realizado el debate, el oficialismo se impuso
A las 21:40 de este jueves, la Asamblea Legislativa Plurinacional aprobó, por mayoría absoluta, la modificación al Reglamento de preselección de candidatos judiciales, luego de que se presentara la moción de suficiente discusión.
Pese a las observaciones de la oposición sobre modificaciones e incorporaciones, que hacían de este reglamento “un traje a medida” para la elección magistrados, como señaló el diputado Carlos Alarcón, la norma finalmente fue aprobada.
El legislador observó que, al haberse presentado tan solo seis candidatos -a una elección para más de 50 cargos- el amparo constitucional presentado y admitido, con el que se suspendió el proceso de preselección, fue una forma para “ganar tiempo”, que el oficialismo encontró.
“El primer objetivo, obviamente, ha sido ganar un nuevo plazo para tratar, nuevamente, de lograr tener sus postulantes afines, sus candidatos a jueces; para que siga el servilismo político del sistema de Justicia a favor del Gobierno y del MAS”, manifestó en su exposición Alarcón.
“Ese es el objetivo y, para eso, el primer plazo ha sido un ‘tongo’ de exploración, donde han logrado identificar cuáles eran las debilidades, las vulnerabilidades de sus candidatos proyectados. Y, de acuerdo con eso, han ido arreglando y ajustando (en) la comisión mixta y, ahora, en este pleno, los requisitos para que se acomode el traje a medida”, agregó
Los parlamentarios Alarcón, Wálter Villagra y Silvia Salame cuestionaron que se hubieran hecho cambios que no estaban relacionados con la acción de amparo constitucional resuelto en la Sala Constitucional en Trinidad.
Una de las más cuestionadas es la relacionada con la filiación política que, en la anterior propuesta, marca ocho años anteriores a su postulación, mientras que en la que se aprobó, no indica fecha; por lo que el candidato podría renunciar horas antes de postularse y hacerlo sin inconvenientes, como manifestaron algunos parlamentarios.
Fuente: EL DEBER