* El expresidente de Comcipo es considerado un “mártir de la democracia y la justicia”
Potosí, Kollasuyo Digital
Juan Carlos Manuel Huallpa llegó a su última morada con un retraso de una hora, más o menos; pero ese detalle no será recordado, aunque si este 30 de enero, porque fue enterrado alguien que para mucha gente es considerado como un mártir de la democracia y la justicia.
Acompañado por cientos de personas, más de un decena portando banderas potosinas y el féretro tapado con la tricolor boliviana, así llegó al cuartel 25 de la parte norte del cementerio general, pasadas las 15 y 30 horas.
Allí lo esperaba un mausoleo nuevo – que él estreno, como esas coincidencias que tiene el destino – el cual es su morada final y al que ingresó luego de varios y sendos discursos, que no pudo escuchar; pero que se refirieron a su personalidad, defensa de los intereses regionales y al Gobierno.
Hubo llanto, dolor, resignación, solidaridad y bronca, entre otras cosas – como cuando se va un ser muy querido – y al final se lo despidió con un grito de guerra al expresidente del Comité Cívico Potosinista que murió en la clandestinidad porque era perseguido por el Gobierno y los operadores de justicia, por un supuesto crimen cometido, que nunca se le comprobó. Pasaron más de 14 meses desde el operativo policial hasta este 30 de enero histórico para el movimiento cívico…