En Santa Cruz se dio a conocer un caso de maltrato a un niño de tres años que padecía del Trastorno de Espectro Autista (TEA), de acuerdo a la madre, personal de la guardería lo ataba con cinta de embalaje a una silla para que no se mueva, además que tapaban su boca para evitar que hable.
Fue uno de sus compañeros de guardería quien denunció a su propia madre lo que veía, preocupada, la mujer fue a preguntar sobre este hecho. La administradora de la institución le confirmó el abuso al menor. Es entonces que la madre de la víctima es alertada, al llegar a la institución el personal negó los hechos.
Sin embargo, no se rindió y, amenazando con denunciar a la guardería, pidió ver las cámaras de seguridad, donde pudo evidenciar el abuso con el cuál se trataba a su hijo.
El especialista, Dr. Jorge Reque, afirma a Urgente.bo que este tipo de abusos hacen que el niño “pueda ser suceptible a cuadros de ansiedad infantil, de depresión infantil. Si es un niño que no tiene desarrollado el lenguaje, lo más probable es que tenga conductas agresivas, porque, como no puede expresar sus emociones de dolor y tristeza, generalmente tiene conducta agresiva, se lastiman, están agitados e irritables.”
Fuente: URGENTE.BO