Los neandertales de Combe-Grenal (Francia) preferían cazar en entornos abiertos, y sus estrategias de caza no se alteraron durante los periodos de cambio climático.
Es la conclusión de un estudio publicado en la revista de acceso abierto ‘PLOS ONE’ por Emilie Berlioz, del CNRS/Université Toulouse Jean Jaurès, en Francia, y sus colegas, como parte de la investigación llevada a cabo en el proyecto ANR DeerPal.
El yacimiento arqueológico de Combe-Grenal estuvo habitado por neandertales durante muchos milenios a lo largo del Paleolítico Medio, desde hace unos 150.000 a 45.000 años. Estos habitantes cazaban animales locales cuyos restos también se encuentran en el yacimiento.
Durante la ocupación de los neandertales, la región experimentó numerosas oscilaciones del clima y de las condiciones ambientales que se sabe que repercutieron en los hábitos de la fauna local. En este estudio, Berlioz y sus colegas investigaron las preferencias de hábitat de las especies cazadas por los neandertales para averiguar si estos cambios ambientales afectaron a las estrategias de caza de los neandertales.
Los autores examinaron casi 400 especímenes de animales cazados en el yacimiento, entre ellos bisontes, uros, ciervos rojos y renos, utilizando el desgaste de los dientes de los animales para deducir su dieta durante los últimos días de su vida.
Se descubrió que los animales se alimentaban principalmente de plantas que crecían en un entorno abierto similar a la tundra. Este patrón fue constante a lo largo de los muchos milenios registrados en Combe-Grenal, lo que sugiere que estos animales cazados siguieron prefiriendo una ecología de alimentación en hábitats abiertos, incluso en épocas de importantes fluctuaciones climáticas.
Como resultado, los cazadores neandertales “permanecieron al aire libre”, y no se vieron obligados a cambiar a tácticas de caza adaptadas a encuentros cercanos en entornos boscosos. En Combe-Grenal –prosigue–, estos resultados relativizan el vínculo generalmente establecido entre la evolución de la producción de herramientas líticas y la adaptación de las estrategias de caza de las poblaciones humanas en respuesta a los cambios medioambientales”.
Esta información es esencial para comprender las influencias de los cambios medioambientales locales sobre la cultura material o la historia humana. Un examen más detallado de datos similares en otros yacimientos permitirá a los investigadores estudiar si esta tendencia se mantiene en distintas épocas y regiones.
Los autores añaden que “el análisis de la textura del microdesgaste dental de las presas de ungulados de Combe-Grenal demuestra que las estrategias de caza de los neandertales no se vieron afectadas por las oscilaciones climáticas y medioambientales a lo largo de milenios”.
Fuente: Europa Press