Un caza J-11 chino se acercó a seis metros de un avión de reconocimiento RC-135 americano. Ambos países se acusan mutuamente de haber puesto en riesgo la seguridad aérea en el Mar de China Meridional
Un portavoz del Ejército Popular de Liberación (EPL) ha acusado a Estados Unidos de mentir sobre el incidente ocurrido el pasado 21 de diciembre en los cielos del Mar de China Meridional. El Pentágono denunció a través de un comunicado que un caza de guerra J-11 chino realizó una maniobra “insegura” a de seis metros de un avión de reconocimiento estadounidense RC-135. Según el Comando del Indo-Pacífico, el aparato de EEUU tuvo que actuar para evitar una posible colisión con la aeronave china. Como prueba, EEUU publicó el vídeo en el que se ve efectivamente a los dos aviones volando muy cerca el uno del otro, si bien no queda claro que ninguno de los dos pilotos rivales tuviera que hacer maniobra alguna para evitar una colisión.
Horas después, el Comando del Teatro Sur del EPL chino reaccionó asegurando que EEUU engañó a su audiencia al publicar ese vídeo diciendo, además que se trata de “una calumnia y una exageración”. El coronel Tian Junli ha explicado que a pesar de las múltiples advertencias desde el lado chino, el avión estadounidense alteró repentinamente su posición de vuelo y empujó al aparato chino hacia la izquierda “en un peligroso movimiento de aproximación”, lo que comprometió seriamente la seguridad de vuelo del avión militar de Pekín. A juicio de las autoridades del país comunista, esta operación supuso una violación severa de las Reglas de Comportamiento para la Seguridad de Encuentros aéreos y marítimos entre China y EEUU, tal y como publica el diario pro chino Global Times. Para apoyar su versión, el gobierno chino publicó un vídeo del mismo incidente pero visto desde la cámara de su avión, el J-11.
El vídeo del incidente difundido por China
Según esta versión China dice que el avión de EEUU RC-135 “alteró intencionalmente su posición de vuelo en una aproximación peligrosa hacia el avión chino a las 11:25 am del 21 de diciembre”. La prensa china asegura que “es obvio que el avión estadounidense maniobró activamente hacia la izquierda hacia el avión chino, verificando que fue el lado estadounidense el que realizó movimientos peligrosos”, dijo al Global Times un experto militar chino bajo condición de anonimato.
El video del incidente difundido por EEUU
El Pentágono había explicado con anterioridad que el caza chino se acercó a seis metros del aparato americano llevando a cabo “una maniobra insegura” que puso en peligro el vuelo del avión de reconocimiento.
El RC-135W es un avión de vigilancia electrónica que se puede utilizar en cualquier teatro en misiones tanto estratégicas como tácticas. Sus sensores son capaces de absorber las emisiones electrónicas de comunicaciones, radares y otros sistemas. EEUU los utiliza con frecuencia para operaciones de reconocimiento en distintos puntos de Asia.
China ha exigido “enérgicamente a Estados Unidos que restrinja los movimientos de sus fuerzas marítimas y aéreas de primera línea, que cumpla estrictamente con las leyes internacionales y los acuerdos relacionados y que evite accidentes marítimos y aéreos”, dijo Tian. Por su parte, Wang Wenbin, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, dijo en una conferencia de prensa que EEUU representa “un grave peligro para la seguridad nacional de China” y que “las acciones provocativas y peligrosas de Estados Unidos son la raíz de los problemas de seguridad marítima”.
El diario Financial Times publicó este fin de semana que el 21 de diciembre el Ejército Popular de Liberación estaba realizando un simulacro de ataque a buques de Estados Unidos en el Mar de China Meridional. Ese día, el ejército de Estados Unidos había enviado al Mar de China Meridional y al sur del Estrecho de Taiwán tres aviones de reconocimiento marítimo P-8A, un avión de vigilancia RC-135V y un avión de control y alerta temprana aerotransportada E-3G desde la base aérea de Clark y la base aérea de Kadena. Se cree que uno de esos aparatos fue interceptado por el caza chino J-11.
Fuente: LA RAZON ESPAÑA