El seleccionador de Francia, Didier Deschamps, ha asegurado que el delantero Antoine Griezmann “ilumina” el juego del equipo, afirmando que tiene “una generosidad superior a la media”, y espera que ofrezca su mejor versión este miércoles en las semifinales del Mundial de Catar ante Marruecos, donde espera que los suyos tengan “el balón” para tratar de golpear a un rival con “una organización muy racional”.
“Antoine es un jugador que tiene esa capacidad de cambiar la cara del equipo. Es técnico, tiene un gran volumen de juego en un papel diferente que le sienta muy bien. Le gusta tanto hacer una entrada como hacer un pase. Con su pierna izquierda, tiene la habilidad de iluminar el juego, y tiene una generosidad superior a la media. Ha estado al más alto nivel durante 10 años y tiene la capacidad de estar a su mejor nivel cuando es necesario”, declaró en rueda de prensa.
Ante la posibilidad de llegar a la final por segundo Mundial consecutivo, el preparador galo no quiso hacer comparaciones con la Francia campeona de Rusia 2018. “Normalmente no comparo, ya sea hace cuatro o diez años. La única similitud es que la selección de Francia está en semifinales como hace cuatro años. No lo hicimos todo a la perfección, pero logramos muchas cosas a partir de defender bien, ser peligrosos, marcar goles y, cuando hay dificultades, afrontar las más urgentes con un estado de ánimo colectivo”, indicó.
En este sentido, aseguró que no tendrá “ningún mensaje concreto” para sus futbolistas. “Mañana será un partido de fútbol, aunque haya historia y pasión. Como deportista, me gusta quedarme en mi lugar”, explicó. “Estamos en semifinales, ya es un buen Mundial. No hay secretos; se necesitan muchas cosas: la calidad de los jugadores, la fuerza colectiva, el estado de ánimo y aguantar un poco en los partidos para hacer que se inclinen de nuestro lado. Para mí, la palabra clave es adaptarse”, añadió.
Además, considera que la eliminatoria “está 50-50%”. “Marruecos tiene tantas posibilidades de jugar la final como nosotros”, advirtió, resaltando el hecho de que encajan pocos goles. “Haremos todo lo posible para encontrar la solución. Este equipo tiene una capacidad de defensa muy buena. No se trata de reducir a Marruecos al sector defensivo. Su organización es muy racional, sus individualidades le permiten defender bien y dañar a todos los rivales”, subrayó.
“Queremos tener el balón y crear peligro. Marruecos no renuncia a tener el balón, pero cada uno tiene su plan de juego. Mi selección empezará este partido con la ambición de tener el balón lo máximo posible, pero sin quedarse quieta”, continuó.
Por último, Deschamps restó importancia a la gran cantidad de aficionados marroquíes que habrá en las gradas. “No me gusta la palabra hostil. Tienen un fervor popular muy importante, hacen mucho ruido. Prepararse para un partido significa prepararse para lo que sucede en el campo, pero también para el entorno que lo rodea”, finalizó.
Fuente: Europa Press