La víctima, de 35 años, luchó por su vida. Sus familiares exigen que el feminicida sea capturado. La Policía desplazó personal en distintas zonas para dar con el sospechoso.
“Justicia para Getrudes”, el clamor que se escuchó durante el último adiós a una madre de cinco hijos, víctima de feminicidio, en Cochabamba. La mujer, de 35 años, fue hallada sin vida el 6 de diciembre, siete días después de que sus familiares la reportaran como desaparecida. Su cuerpo fue encontrado en un barranco del camino a Santiváñez.
Vecinos de Tirani, comunidad donde vivía Getrudes, acompañaron ayer a la familia Arispe Flores hasta el Cementerio de Tiquipaya. Los dolientes exigen que Edwin C.L., exconcubino de la víctima, sobre quien pesa una orden de aprehensión, sea capturado. La Policía se encuentra en distintas zonas del departamento siguiendo los pasos del sospechoso, manifestó el director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV), Jhonny Coca.
Emigdio Arispe, padre de Getrudes, dijo que no descansará hasta que el feminicida de su hija mayor sea capturado y sentenciado. “Pido a las autoridades que se muevan, que atrapen a ese asesino. No tiene corazón ¿Qué clase de persona es para que así le haga a mi hija? Toda la semana la hemos buscando llorando, de una semana cabalito la encontramos, pero sin vida. Ahora quiero justicia de los ministros y de todas las autoridades, que me ayuden, porque no he recibido nada de apoyo. Agradezco a los comunarios y conductores de la línea 123, quienes han estado conmigo y, gracias a eso, dimos con mi hija”.
Coca dijo que hay avances en la investigación, pero algunos detalles los mantiene en reserva para no entorpecer el proceso. Se toman declaraciones a posibles testigos, entre ellos tres menores de edad.
LUCHÓ POR SU VIDA
Getrudes se aferró a la vida. “Su certificado médico forense refiere que ella se habría defendido, ha luchado por su vida. Lamentablemente la fuerza, la violencia que ha ejercido ese ciudadano (feminicida) ha sido más y le ha quitado la vida”, señaló el abogado de la familia, Juan Carlos Montaño.
La mujer habría sido asesinada el 29 de noviembre, el día en que desapareció, según el reporte del director de la FELCV, quien dio a conocer que la causa de muerte es asfixia anóxica por obstrucción de vías respiratorias. La víctima también recibió golpes en la cabeza.
DESAPARICIÓN Y FIN DE LA BÚSQUEDA
La última vez que la vieron fue el 29 de noviembre, al promediar las 19:00. Ese día, Getrudes salió de su domicilio ubicado en Tirani para resolver con su exconcubino Edwin C.L. un tema económico. Algunos vecinos dijeron que los oyeron discutir y, después de unos minutos, el vehículo del ahora sospechoso ya no estaba en el lugar.
Desde entonces, la mujer no volvió más a su vivienda, por lo que su familia dio aviso a la Policía. Los familiares y vecinos se organizaron y salieron a buscar a Getrudes por distintos sitios. Dieron con el cadáver en una zona de difícil acceso y a casi 40 kilómetros de distancia de su domicilio.
El grupo Bersa rescató el cadáver y luego los familiares hicieron el reconocimiento y confirmaron que la víctima era Getrudes Arispe Flores.
Fuente: OPINION
