El Gobierno condena “firmemente” la incitación y las amenazas de muerte contra periodistas.
Al menos cinco profesores fueron asesinados el domingo en un ataque perpetrado por personas armadas no identificadas contra un centro educativo en la localidad de Bittou, situada en el sur de Burkina Faso.
Las autoridades de la región Centro-Este habían confirmado la muerte de cuatro profesores en el incidente, que tildaron de “ataque bárbaro”, si bien el portal de noticias Infowakat ha confirmado el hallazgo de un quinto cadáver en la zona.
Todos los centros educativos de la región permanecieron cerrados durante la jornada del lunes como gesto de condena a la matanza, sin que ningún grupo haya reclamado hasta el momento la responsabilidad del ataque.
Burkina Faso ha experimentado en términos generales un aumento significativo de la inseguridad desde el año 2015, con ataques obra tanto de la filial de Al Qaeda como la de Estado Islámico, lo que ha provocado una oleada de desplazados internos y refugiados hacia otros países de la región.
Por otra parte, las autoridades de transición de Burkina Faso han condenado “firmemente” la incitación a la violencia y las amenazas de muerte contra periodistas del país a través de mensajes publicados en redes sociales.
“Al gobierno le preocupan los excesos verbales observados en el espacio público que van desde el llamado a la violencia física y el saqueo de propiedades hasta el asesinato de personas”, ha dicho un portavoz gubernamental, tal y como ha recogido la agencia estatal burkinesa de noticias, AIB.
Así, ha detallado que “los últimos casos hacen referencia a los periodistas Lamine Traoré, del Grupo Oméga, y Newton Ahmed Barry, objeto de declaraciones violentas a través de redes sociales”, al tiempo que ha denunciado a los que “azuzan la intolerancia y la desunión”.
En esta línea, ha prometido “asumir totalmente sus responsabilidades” y ha reseñado que “se han adoptado todas las disposiciones útiles para garantizar la libertad de prensa y de opinión, así como la seguridad de los bienes y las personas”.
La junta militar de Burkina Faso anunció el sábado la suspensión de las operaciones de la emisora Radio France Internationale (RFI) “hasta nuevo aviso” por dar voz a “un mensaje de intimidación a la población atribuido a un líder terrorista”, en referencia a un vídeo del Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), rama de Al Qaeda en la región.
En su información, RFI recogió la amenaza formulada por JNIM contra los civiles que ayuden a las autoridades en su enfrentamiento contra el grupo terrorista, lo que llevó a Uagadugú a afirmar que “este medio contribuye así a una maniobra desesperada de los grupos terroristas para disuadir a miles de burkineses movilizados por la defensa de la patria”.
La decisión fue criticada por el director de Reporteros Sin Fronteras (RSF) para África, Sanibou Marong, que destacó que “supone un atentado a la libertad de información y al derecho de millones de burkineses a acceder a ella”.
“La crisis de seguridad que atraviesa el país no debe ser un pretexto para impedir a los periodistas cubrirla con toda responsabilidad e independencia. Pedimos a las autoridades que reviertan su decisión en nombre del derecho del público a informaciones plurales”, zanjó.
Fuente: Europa Press