Su capacidad antioxidante es superior a la de los arándanos, las granadas, las cerezas o la remolacha
Se estima que una persona adulta se compone unos 37 billones de células, eso sin contar las células de los millones de microorganismos que forman el microbioma. Cuidar de las células a través de una dieta saludable, el descanso (unas 8 horas por la noche) y un estilo de vida activo podría influir en el equilibrio de un tejido o en el desarrollo de una patología. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 70 por ciento de las muertes prematuras están causadas por enfermedades no transmisibles, en las que el estilo de vida juega un papel principal. Además, advierte de que cada año podrían salvarse 1,7 millones de vidas si se aumentara lo suficiente el consumo de frutas y verduras, lo que repercutiría en una menor incidencia de enfermedades cardiovasculares y oncológicas.
Los procesos metabólicos normales de la vida cotidiana como respirar, comer, realizar ejercicio físico o las propias toxinas del medio ambiente pueden generar radicales libres en el organismo. Estos radicales libres pueden atacar a las células sanas y se cree que este daño contribuye a la inflamación y al envejecimiento; así como a las enfermedades crónicas, como las cardiopatías y el cáncer. Para ayudar a proteger las células sanas del daño causado por los radicales libres en el organismo, los profesionales de la salud recomiendan los antioxidantes procedentes de fuentes alimentarias.
En este sentido, diversos estudios han evidenciado que el pistacho es uno de los alimentos con mayor potencial antioxidante y que su consumo ayuda a mantener sanas a las células del cuerpo. De hecho, los expertos en salud recomiendan tomar 49 pistachos a diario, entre horas. Ahora, una investigación de la Universidad de Cornell (Estados Unidos) ha revelado que este fruto seco destaca por su capacidad anti proliferativa sobre células tumorales de cáncer de colon, hígado y mama.
La elevada actividad antioxidante del pistacho se debe a que contienen una gran variedad de fitoquímicos importantes, entre los que se encuentran diferentes miembros de la familia de la vitamina E carotenoides (beta- caroteno, luteína y zeaxantina), fenólicos y flavonoides. La combinación o interacción de estos antioxidantes beneficiosos, compuestos bioactivos, junto a otros nutrientes, es probablemente lo que contribuye a los numerosos beneficios para la salud que se han observado en los estudios sobre los pistachos en los últimos años.
El nuevo estudio demostró que los extractos fitoquímicos del pistacho mostraban una potente actividad anti proliferativa contra las células humanas de cáncer de mama, hígado y colon, in vitro; con una actividad excepcionalmente alta contra las células humanas de cáncer de mama. Los investigadores también determinaron que la capacidad antioxidante del pistacho es superior a la de la mayoría de alimentos comúnmente conocidos por su poder antioxidante como los arándanos, las granadas, las cerezas, la remolacha o el vino tinto.
Fuente: LA RAZON ESPAÑA