Una investigación en roedores sugiere que los largos periodos de vigilia podrían causar que el cerebro humano elimine neuronas indiscriminadamente.
Pero eso no es lo más grave, ya que, incluso si se recuperan las horas perdidas de sueño, el daño no podría ser revertido, indica el artículo publicado en 2017 en la revista The Journal of Neuroscience.
Si bien el estudio fue realizado en roedores, los autores creen que sus resultados podrían extrapolarse a los seres humanos, quienes comparten muchas similitudes genéticas con estos pequeños mamíferos.
Menos neuronas a más tiempo de vigilia
Para el experimento, el equipo de neurocientíficos, comandado por el italiano Michele Bellesi, sometieron a un grupo de ratones macho de cuatro semanas de edad a distintos hábitos de sueño y luego los indujeron a la muerte para analizar sus últimos rezagos de actividad neuronal.
En específico, buscaban saber qué ocurre con dos tipos de células de apoyo para las neuronas: las microgliales y los astrocitos. Mientras que las primeras eliminan a las neuronas dañadas, las segundas se encargan de darles mantenimiento y asegurar la sinapsis.
Así, descubrieron que, en el grupo de ratones privados de sueño por días, los astrocitos se activaban de manera perjudicial y aumentaban su actividad para ‘comer’ partes claves de la sinapsis.