El Presidente aseguró que la decisión sobre la fecha del censo se tomó con base a recomendaciones de organismos internacionales, las conclusiones de la mesa técnica desarrollada los últimos días en Trinidad y con el objetivo de que se garantice que sea un proceso técnico y que llegue a todos los rincones del país.
A través de un mensaje oficial, el presidente del Estado, Luis Arce, anunció que la realización del censo será el 23 de marzo del 2024. Además, afirmó que, en base a resultados preliminares, en septiembre del mismo año se procederá la redistribución de los ingresos para los departamentos y municipios.
“Quiero anunciar dos decisiones. Primero, el empadronamiento nacional de población y vivienda se realizará el 23 de marzo del 2024. Segundo, con base a estos resultados preliminares se hará la redistribución de recursos en septiembre de 2024, un mes antes de lo que habíamos propuesto inicialmente”, afirmó el Jefe de Estado.
El Presidente, en ese sentido, aseguró que la decisión sobre la fecha del censo se tomó con base a recomendaciones de organismos internacionales, las conclusiones de la mesa técnica desarrollada los últimos días en Trinidad y con el objetivo de que se garantice que sea un proceso técnico y que llegue a todos los rincones del país.
“No puede haber bolivianos excluidos del censo por ninguna razón, sería inaceptable, discriminadora y negadora de los principios del Estado Plurinacional”, aseveró.
Asimismo, señaló que se debe garantizar que los resultados del censo sean confiables “sin incertidumbre ni especulaciones” y es a partir de esos resultados que se debe trabajar en políticas públicas integradas hacia un desarrollo integral.
Además, afirmó que los resultados del censo – ni en Bolivia ni en el mundo- son una “varita mágica que cambia la realidad de la población de manera mágica”. Los cambios, dijo, son producto de políticas que se encaran a nivel nacional, regional y municipal.
“Les pido que su reflexión haga énfasis no en lo que nos separa, sino en lo que nos acerca y en lo que es lo importante para la población. Y uno de los resultados más importantes es que hasta septiembre de 2024, mes aniversario Santa Cruz, los recursos por coparticipación serán distribuidos”, señaló a tiempo de pedir el cese de la violencia en tierras cruceñas.
Imposible que sea el 2023
En su discurso, el Presidente del Estado fue enfático en señalar que es “imposible” realizar el censo el 2023, tal y como lo pide, principalmente, el Comité Interinstitucional de Santa Cruz, instancia que impulsa un paro de 21 días en el departamento cruceño.
Arce, en esa línea, rememoró los intentos de diálogo que tuvo el Gobierno con el Comité cruceño y los procesos que se encaró para definir una fecha técnica de la consulta nacional.
“La voluntad del Gobierno siempre fue que el proceso se realice lo más pronto posible y que sus resultados sean precisos y de calidad”, aseveró Arce.
Recordó que, en primera instancia, el objetivo era realizar el censo el 16 de noviembre de 2022; sin embargo, señaló que “identificamos que no se hizo la actualización demográfica” y, por lo tanto, organismos internacionales recomendaron que el censo se realice en octubre del 2024, “cumpliendo todas las actividades con rigurosidad en base a estándares internacionales”.
Acto seguido, recordó que en julio de este año se convocó al Consejo Nacional de Autonomías y, en ausencia de gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, se decidió que el censo sea entre mayo y junio del 2024, por lo que se emitió el decreto 4760.
“Cuando se trata de hacer la cosas bien no revisamos en plazos, porque tenemos la responsabilidad de hacer un censo de calidad que se merecen los bolivianos”, aseveró el Jefe de Estado.
Por eso, dijo, se inició un proceso de socialización en todos los departamentos del país y, afirmó, se presentaron distintas propuestas a los líderes del paro cruceño. Incluso, señaló que se logró un pre acuerdo con el Comité Interinstitucional cruceño, mismo que no logró oficializarse
En octubre, prosiguió, se convocó a una reunión a más de 300 autoridades subnacionales, indígenas y universitarias a una reunión en Cochabamba, donde se coincido “ de manera unánime” – y nuevamente sin la participación del Gobernador de Santa Cruz- que el censo “es técnico, debe ser inclusivo y la fecha debe ser determinada por un proceso técnico y no político”.
Finalmente, rememoró el 4 de noviembre se instaló una mesa técnica en Trinidad, con el objetivo de definir la fecha del censo, y con la participación de 41 delegaciones técnicas de todo el país, aunque cinco abandonaron el encuentro “sin conocer sobre su propuesta de llevar adelante el censo el 2023”.
“Durante estas más de 50 horas de trabajo se escucharon y atendieron todas las propuestas”, resaltó y aseguró que se escuchó “con la mayor amplitud” la propuesta del Comité Interinstitucional cruceño para que el censo sea el 2023.
Empero, prosiguió, no se encontró la misma apertura de parte de los líderes cruceños y por eso, finalmente, tomó la decisión de que el censo sea el 23 de marzo de 2023.
“No podemos seguir demorándonos cuando dirigentes que representan a una parte de Santa Cruz mantienen su postura de no alcanzar propuestas (…) La democracia también es tomar decisiones en beneficio de las mayorías”, sentenció.
Finalmente, el Presidente del Estado dejó en claro que no busca descalificar al Comité Interinstitucional de Santa Cruz ni el cabildo cruceño ni sus posiciones, “siempre que estén en el marco del respeto y una convivencia democrática”.
Por eso, expresó su rechazo a que líderes “de una parte” de Santa Cruz busquen imponer “bajo una lógica del todo o nada la realización del proceso censal en una fecha que técnicamente se ha demostrado no es posible”.
Fuente: OXIGENO.BO
